La obesidad aumenta el riesgo de infecciones y es un factor que desencadena la formación de “súper bacterias” resistentes a antimicrobianos, en especial a los antibióticos, por su abuso y uso incorrecto, alertó el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, ISSSTE.
Es por eso que se implementó una estrategia en las unidades médicas y hospitales para supervisar el funcionamiento de los Subcomités para el Control de Antibióticos, cuya responsabilidad es revisar que su prescripción sea adecuada, evitar el abuso, identificar las infecciones más frecuentes y reconocer resistencias a tratamientos para tomar las medidas pertinentes.
Cada kilo de más en el cuerpo humano significa mayores riesgos contra la salud y el exceso de grasa e índice de masa corporal, IMC, en personas obesas modifica el microbioma (bacterias naturales del cuerpo) y baja las defensas lo que incrementa la amenaza de infecciones.
Quienes tienen peso excesivo están expuestas a dosis de antibiótico altas, por otra parte, el excedente de grasa provoca que estos fármacos no se asimilen de manera correcta e incluso algunos antibióticos por su propia bioquímica se depositan más en el tejido adiposo, lo cual favorece que las infecciones se tornen cada vez más complicadas.
Cuando un paciente no se toma los medicamentos en dosis, horarios y duración indicados por su médico, abre una oportunidad para que alguna cepa de la bacteria se autorreplique, multiplique y transfiera genes de resistencia.