La Unidad de Gestión del Centro Histórico rechazó un supuesto aumento de mercaderes informales en céntricas calles, al asegurar que no se les está tolerando; diariamente el cuerpo de inspectores retira a aquellos que no están autorizados.
Según el padrón elaborado por esa dependencia municipal de reciente creación, son alrededor de mil 700 los informales (ambulantes y semifijos) que operan en el centro de la ciudad en diversos giros, y se sigue trabajando para mantenerlos bajo control, es decir, que no lleguen más ni que ocupen espacios que no tienen autorizados.
Personal del área explicó que hay comerciantes informales que están autorizados para trabajar en determinada área, pero en ocasiones son sorprendidos por los inspectores fuera de ella, por lo que se les conmina a regresar a su espacio.
En otro casos, se detecta a ambulantes que no cuentan con algún permiso y se les retira, situación que se repite diariamente, por lo que se deben aplicar sanciones y es obligado su retiro, pero solamente se desaloja a los no autorizados.
Asimismo, a los mercaderes se les respetan sus derechos humanos; ellos, por su parte, deben tener presente que para vender en la vía pública se requiere de un permiso y hacerlo sin autorización es violar la ley. Sin embargo, no se están expidiendo nuevos permisos.
Con respecto a las organizaciones de comerciantes, se dijo que hay el compromiso con los líderes para colaborar con los planes de reordenamiento del comercio informal y, hasta el momento, han respetado los acuerdos.