El Instituto de Fiscalización Superior del Estado (IFSE) trabaja con apego a las leyes y absoluta transparencia, dijo su titular Rodrigo Lecourtois López.
La publicación de las Cuentas Públicas en las páginas del IFSE no representa una obligación legal, pues incluso son documentos que no pertenecen al instituto, es información ajena, explicó.
“Anteriormente, si se publicaban en algún apartado, pero desconocemos porque se hacía, entiendo que era una especie de servicio para quien quisiera consultarlas y seguramente se hacía esto con el visto bueno de los entes, quienes de acuerdo a la ley, si tendrían la obligación de incluso tener a la vista las Cuentas Públicas de los últimos 6 ejercicios; así los interesados, sabían en donde localizar esos documentos”.
Explicó la ley establece que “la generación y publicación de la información financiera de los entes públicos a que se refiere este Título, se hará conforme a las normas, estructura, formatos y contenido de la información, que para tal efecto establezca el consejo y difundirse en la página de Internet del respectivo ente público”.
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Además, “la información financiera que deba incluirse en Internet en términos de este Título deberá publicarse por lo menos trimestralmente, a excepción de los informes y documentos de naturaleza anual y otros que por virtud de esta Ley o disposición legal aplicable tengan un plazo y periodicidad determinada, y difundirse en dicho medio dentro de los treinta días naturales siguientes al cierre del período que corresponda. Asimismo, deberá permanecer disponible en Internet la información correspondiente de los últimos seis ejercicios fiscales”.
Respecto a los informes finales de auditoría que serán entregados por primera vez este año el 1 de diciembre, “la ley si nos obliga a publicarlos en nuestros sistemas electrónicos después de que se entreguen al Congreso del Estado, a través de la Comisión de Vigilancia. Sin embargo, la ley no establece algún plazo específico para tener que hacer esto”, dijo Lecourtois López.
Aclaró que “a partir del momento de la entrega de estos informes, es complicado tener un control para evitar lo que algunos llaman “filtraciones”, pero además, estarían catalogados como documentos públicos”.