Ahora no solamente eliminaron la hemodiálisis en el hospital del ISSSTE, Carlos Diez Gutiérrez porque su personal se fue de vacaciones sino que este día comenzaron a llamar desde temprana hora a los enfermos para decirles que no se presentarán a su tratamiento en el hospital Carlos Bárcenas ubicado en avenida Salvador Nava Martínez.
La señora Rosa, llevó a su papá muy temprano por la mañana a la clínica Carlos Bárcenas para que le realizarán este procedimiento y cuando llegó se le indicó que no había aire y que no se le podría realizar el tratamiento que realiza tres veces por semana.
Entre los familiares de pacientes han tejido una red de comunicación debido a que por lo menos tienen que estar presentes en los hospitales junto con sus enfermos de entre 3 a 5 horas, por lo que todos se conocen y rápidamente comenzaron a señalar qué personal administrativo del organismo estaba comunicándose vía telefónica para informarles que no había máquinas ya que se habían descompuesto.
Inclusive algunos enfermeros comenzaron a circular mensajes de texto para apuntar que hasta después de las 9 de la noche de este miércoles acudiría el equipo especializado para reparar las máquinas de hemodiálisis y se le comunicaría posteriormente cuando se les repondría el servicio.
Son decenas los pacientes que acuden desde muy temprano ahora y hasta muy tarde a practicarse el lavado de sangre, y este día se manifiestan preocupados ante la imposibilidad de practicarse su tratamiento.
En el país hay 8.3 millones de personas que padecen insuficiencia renal leve, 102 mil personas con insuficiencia renal crónica y 37 mil 642 con tratamientos continua de diálisis, así como 55 mil pacientes que reciben tratamiento renal sustitutivo con diálisis y se dice que al menos la misma cifra no tiene acceso a este tipo de tratamiento.
Se intentó cuestionar al respecto al delegado estatal del ISSSTE, Alberto Rodríguez Jacob, quien no contestó las llamadas para referir que está sucediendo.
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