Se han detectado algunos vacíos en el tema de cumplimiento de las medidas de protección a periodistas, estos problemas tienen que ver con las propias autoridades que están frente a los mecanismos, según señalan Paulina Martel Salas, coordinadora del proyecto Sin Amenaza Defensa Jurídica para Periodistas y Raquel Álvarez Charqueño, abogada de Renace.
Se ha identificado que las autoridades siguen pensando que solamente se tiene que proteger a cierto grupo de personas periodistas cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación, SCJN, ha dicho que contra ataques a los comunicadores hay que tener un criterio mucho más amplio.
En 2022, la secretaría de Gobernación de la República Mexicana explicaba que al menos 495 periodistas, de esos eran 155 mujeres y 360 hombres, los que estaban resguardados por protección para personas defensoras de Derechos Humanos y Periodistas. La mayoría se localizaba en la Ciudad de México, Guerrero, Puebla, Sonora, Tamaulipas, Quintana Roo y Veracruz.
Como abogadas han tenido que ir en muchas ocasiones a los tribunales para que reconozcan a una persona como periodista, que es también una limitante dentro de las medidas de protección a periodistas.
"Están utilizando los mecanismos legales para hostigar, silenciar, y vulnerar el trabajo periodístico".
Ofrecieron gratuitamente un curso de capacitación de Herramientas Jurídicas y de Seguridad Digital para Periodistas, donde motivan a los reporteros potosinos a identificar los ejercicios legales que se están aplicando en su contra de intimidad como una forma de intimidar y agredirlos legalmente, llamado como acoso y hostigamiento judicial.
Desde Renace están creando una red que se denomina Toma tu Remo que busca que existan abogados que de manera gratuita atiendan los casos de las personas periodistas.
"Se ha identificado que los mecanismos de protección a periodistas se utilizan para aplicar una especie de temor en los periodistas, por ejemplo si a mí me llega una demanda de 1500 hojas en la que se me está exigiendo el pago de 10 millones de pesos por una nota periodística que yo publiqué, en el que alguien dice que yo lastimé a su vida privada, reputación, sentimientos, existe primero un temor de volver a publicar, que ese es el efecto silenciador que provocan, otro el pagar a un abogado lo que cuesta defenderse ante las demandas y también ha habido que lo reconocen los periodistas afectaciones emocionales".
Los procesos legales pueden durar de 4 a 8 años y ello busca también que se silencie el trabajo de los medios de comunicación "lo que quieren es provocar que se silencie a los periodistas".
Esta estrategia de Toma tu Remo, actualmente acompaña a siete periodistas, uno de ellos es colectivo y la gran mayoría tiene que ver con daño moral "están impulsando el mecanismo contra las personas periodistas para inhibir su libertad de expresión y se trata de daño moral, publicaciones en medios de comunicación que consideran que se dañó su honra, sentimientos y reputación".
También se ha catalogado que las demandas surgen a partir de artículos de opinión, publicaciones relacionados de investigación en las cuales se dan hechos relacionados con corrupción, conflicto de intereses, con cómo estarían actuando los funcionarios públicos.
"Lo que hacen ante la claridad de la información que se publica para que se haga un diálogo público es que se establecen demandas para silenciar el ejercicio periodístico".
Ante la identificación de este difícil panorama para los que ejercen la libertad de opinión en México se recomienda reconocer que el hecho de que publiquen información de carácter e interés público, es respaldado por los tribunales, también es trascendental identificar que cuando se inicia un proceso legal, tienen que estar acompañados de redes de apoyo, ubicar organizaciones que auxilian en estos procesos legales, pero también hacer trabajos relacionados con investigación que permita respaldar la información que están publicando todos los días.