Estacionar un vehículo en un área no permitida es una de las faltas al reglamento de tránsito que más se cometen en la capital; dejar el automóvil sobre la banqueta y obstruir rampas para discapacitados son frecuentes, pero hay otras como el estacionarse sobre o a un lado de un camellón, área verde o peatonal, que también son sancionadas.
Al día, de acuerdo con estimaciones de la Dirección de Policía Vial y de Movilidad, se llegan a aplicar entre 60 y 80 multas por estacionamiento en lugares prohibidos; el estacionarse sobre la acera o banqueta, vías destinadas para ciclistas o área de espera de ciclista, al lado o sobre un camellón o andador peatonal cuesta una multa de 10 UMA's, es decir, mil 85.70 pesos.
En cuadrantes como Cordillera Real, próximo a Sierra Leona, en el poniente de la capital, es constante el estacionamiento de vehículos sobre el camellón; según la Policía Vial se han atendido reportes de vecinos, debido a que la mayoría de tales unidades son de comensales que acuden a negocios cercanos, principalmente bares y restaurantes; algunas veces se localiza la unidad, y en otras se acude y ya no está en el lugar.
Sin embargo, hay muchos otros sitios donde esa falta al reglamento de tránsito es frecuente o diariamente, como ocurre frente a las oficinas de Parquímetros, en la avenida Reforma, cuyos empleados dejan sus vehículos si no sobre el camellón, sí a un costado del mismo.
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También en las laterales de la carretera a Matehuala, en la avenida Niño Artillero e inclusive en la zona Industrial, aunque aparentemente ahí hubo un acuerdo para permitir el aparcadero sobre el camellón; un acuerdo anterior con la autoridad municipal, también permitió el estacionamiento a un costado del camellón de la arteria conocida como Camino a la Presa, a solicitud de comerciantes de gorditas.
Sin embargo, el estacionarse sobre camellones o áreas verdes, también tiene repercusiones en materia de medio ambiente.
El Reglamento de Parques y Jardines del Ayuntamiento capitalino considera sanciones para quien destruya las áreas verdes, sus accesorios y el equipamiento de cualquier área verde municipal para dar paso a vehículos o destinarlos para uso particular o como estacionamiento; así como transitar dentro de las áreas verdes municipales en vehículo, así sea para eventos religiosos o particulares; en algunos casos se otorga un permiso, de lo contrario hay sanciones cuyo costo depende del grado de daño causado.