- En SLP tan solo son 88 PPL quienes se encuentran luchando contra este consumo
Aumentan las cifras de personas privadas de la libertad (PPL) dependientes al alcohol, así lo señaló el Comité Área San Luis Potosí 1, de Servicios Generales de Alcohólicos Anónimos, A.C. Región Norte-Oriente, quienes además explicaron que en México existen un total de mil 700 personas encarceladas que están en tratamiento para combatir esta adicción.
En dónde San Luis Potosí ha registrado tan solo 88 personas privadas de su libertad en los centros penitenciarios, quienes son tratadas para atender su consumo.
"A nivel nacional se asisten a mil 700 personas privadas de su libertad, aquí en San Luis, se están asistiendo a un promedio de 88 personas y de esas 88 personas que asisten, tenemos un promedio de 18 que son mujeres, los demás son hombres. En el Centro Tutelar asisten en promedio unas 4 personas", explicaron.
Señalaron además que mayoría de estas 88 personas, que se encuentran bajo un tratamiento para a combatir su consumo de alcohol, están presas por cometer delitos bajo el influjo de esta droga.
"La mayoría está presa porque cometieron delitos en un estado alcoholizado, o sustancia tóxica, en dónde cometieron algún ilícito como robo, homicidio, violación, secuestro o algún accidente automovilístico, puede que también hayan estado involucrados en estos hechos de manera voluntaria y hasta involuntaria".
Por otro lado, indicaron que el avance que se ha tenido en estos tratamientos que buscan que los PLL dejen el consumo de este tipo de bebida enervante, ha sido favorable y mucho de los beneficiarios ya han salido de esta adicción.
Actualmente en los Centros de Reinserción Social del estado, se cuenta con un programa activo para atender este tipo de adicción que lleva por nombre "Camino a la libertad", el cual lleva 54 años de estar activo y acompañar a quienes hoy se encuentran tras las rejas y que buscan despegarse del consumo de alcohol.
"Hay personas que tienen dentro de su ciclo de sentencia, dentro del grupo del Alcohólicos Anónimos, siete años de sobriedad dentro de la institución y una vez que salen libres, se adhieren a una institución para continuar con su tratamiento".