La falta de acceso a la educación superior sigue siendo una realidad preocupante en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez. Según informó el titular de la Dirección de Educación y Acción Cívica, Juan Castro Castillo, entre 50 y 60 por ciento de los jóvenes que presentaron el examen de admisión para la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) no lograron obtener un lugar.
Esto representa a más de 2 mil jóvenes que ahora enfrentan el desafío de encontrar alternativas para continuar con su formación académica.
“Afortunadamente, en su momento llevamos a cabo una Feria de Universidades para presentarles más opciones a los jóvenes. Sabemos que hay muchas alternativas muy buenas, y como Ayuntamiento, hemos establecido entre 25 y 30 convenios con universidades para ofrecer costos preferenciales y becas que van desde el 10% hasta el 50% de descuento”, detalló Castro Castillo.
El funcionario destacó que; además de las opciones en universidades privadas, también existen instituciones públicas, como la Universidad Tecnológica de Soledad, que ofrecen descuentos en inscripción y becas que se pueden gestionar una vez que los estudiantes estén dentro de la institución. “Es cuestión de que se acerquen con nosotros, pregunten, y nosotros los asesoremos y apoyemos”, añadió.
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Por otro lado dijo que el panorama académico también ha experimentado cambios en cuanto a las carreras más demandadas. Si bien anteriormente había una mayor inclinación hacia las áreas de Derecho, actualmente las ingenierías, como Mecánica y Mecatrónica, han ganado terreno, al igual que la carrera de Psicología, impulsada por la creciente necesidad de atención socioemocional.
Castro Castillo subrayó que la Universidad Pedagógica ha abierto la carrera de Psicología Educativa, una opción que anteriormente estaba reservada para docentes, pero que ahora está disponible para jóvenes bachilleres. Asimismo, universidades privadas han ampliado su oferta en psicología clínica y educativa, reconociendo la alta demanda en estas áreas.
Además aclaro que la pandemia ha dejado una marca profunda en la salud emocional de los estudiantes, lo que ha derivado en un rezago educativo considerable.
“De cada 10 alumnos, tres o cuatro presentan una situación emocional que impacta su rendimiento académico”, señaló Castro Castillo, quien atribuyó este fenómeno a factores como la desintegración familiar y la falta de tiempo de calidad entre padres e hijos.
Para abordar estas problemáticas, el director de educación dijo que el Ayuntamiento, en colaboración con diversas universidades, ha implementado el Programa de Escuela Segura, que incluye el apoyo de estudiantes de psicología para dar seguimiento a los casos de alumnos con problemas socioemocionales. Estos estudiantes, bajo la supervisión de sus instituciones, brindan observaciones a los padres de familia y canalizan los casos a dependencias especializadas como la clínica Newman.
“La situación socioemocional es crítica, especialmente en la secundaria, donde los jóvenes están en una etapa clave de formación de su personalidad. Es nuestro deber, como área de educación, ofrecer respuestas y apoyo para que puedan superar estos desafíos y continuar con su desarrollo académico”, concluyó.