Maestros del SNTE 26 se manifiestan frente a Palacio de Gobierno

“Por favor, necesito llegar al pediatra, se los pido, mi niña trae un ataque de asma”, clamó una señora con lágrimas en rostro a maestros que bloquearon el distribuidor Vial Juarez de la capital potosina en demanda de la regularización de su sistema de pensiones pero los enojados e sensibles maestros de la sección 26 del SNTE no le permitieron pasar.

La desesperada mujer lloraba e insistía hasta que un agente de Seguridad Pública Municipal le abrió paso por una vía alertan, porque la postura de los docentes fue tajante, nadie pasa. Ni siquiera enfermos.

Al manifestarse los integrantes del magisterio asfixiaron la zona centro y oriente de la capital potosina, y además se ganaron el repudio de centenares de automovilistas que sufrieron por el bloqueo vial que se prolongo ocho horas. Primero por la zona centro de la ciudad, luego avenida Universidad para posteriormente cerrar el Distribuidor Vial Benito Juárez.

Decenas de maestros pertenecientes a la sección 26 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, SNTE, se manifestaron en el primer cuadro de la ciudad, argumentando que el sistema de pensiones se encuentra en una fuerte crisis económica. Caminaron por varias calles de la ciudady terminaron bloqueando el Distrinbuidor Vial Benito Juárez, donde afectaron a miles de personas, para denunciar que las autoridades no han hecho nada por frenar esta situación.

El profesor Pedro Salazar Loredo, Secretario General de la Delegación D-IV-031, denunció que si no se capitaliza este sistema para el año 2020 comenzaría un colapso financiero, por lo que acudieron a Palacio de Gobierno para exigir que se regularice el pago de sus beneficios laborales.

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Con pancartas en mano y gritando sendas declaraciones contra el gobierno estatal, pidieron que el sistema de pensiones que dirige Oziel Yudiche Lara y la propia Secretaría de Finanzas del Gobierno del Estado, y de la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado, se normalice el pago que le adeudan a más de mil 500 jubilados por un monto de 4 mil millones de pesos. Sostuvieron que no solamente el sistema de pensiones atraviesa por una fuerte complicación, sino que además los fondos de vivienda para los trabajadores se encuentran colapsados, pidieron que la administración carrerista tome cartas en el asunto y no desestime la problemática que están viviendo ya que en un futuro cercano habrán de sufrir severas consecuencias económicas.

Los maestros se quedarían sin comer, algunos morirán antes de recibir sus pensiones y otros más no tendrían servicios médicos tal y como está sucediendo ahora que no cuentan con medicina.