Aunque en la capital de San Luis Potosí no está prohibido el uso de animales como motor de arrastre, la dirección de Gestión Ecológica y Manejo de Residuos del Ayuntamiento capitalino sí ha decomisado al menos media docena de carretones al detectarse el mal uso o maltrato de los equinos que los jalan.
Personal de la dependencia municipal citó que de los alrededor de 500 permisos para la recolección de basura por particulares, aproximadamente 60 corresponden a recolectores que utilizan carretones jalados por caballos; se trata de “permisos tolerados”.
Se destacó que las leyes laborales no prohíben y la Ley Estatal de Protección Animal tampoco, pero el uso de animales como motor de arrastre debe cumplir con determinados requisitos como:
1.- Presentar un certificado médico
2.- Que el animal cuente con sus vacunas
3.- Darles periodos de descanso
4.- Proporcionarles alimento adecuado
5.- No cargarlos con peso excesivo
De lo contrario, informó la dirección, no se les otorga el permiso, además de que constantemente son sujetos a una revisión; y en este sentido, se dio a conocer que media docena de los carretoneros tolerados han sido sancionados al detectarse el maltrato de sus animales o porque no se ha cumplido con alguna de las condicionantes.
Asimismo, se resaltó que los permisos que se otorgan, tanto a los que utilizan animales como automotores, solamente pueden ser operados en la capital sin intervención en otros municipios como Soledad de Graciano Sánchez o Mexquitic de Carmona, pues de detectarse esa práctica, deberán ser cancelados.
También informaron que deben disponer de los Residuos Sólidos Urbanos en los sitios autorizados.
Se aseguró que el Ayuntamiento capitalino respeta el trabajo de los ciudadanos dedicados a la recolección de basura, pero que cuando se trata de maltrato animal se espera contar inclusive con reportes ciudadanos con todos los datos posibles, calle, colonia, hora del presunto maltrato o vista de animal con heridas, síntomas de enfermedad o cansancio.
Asimismo, también se ha procurado que los recolectores que todavía utilizan animales como motor de arrastre cambien al arrastre mecánico, lo que se ha logrado al paso de los meses con varios de ellos.