Es importante escuchar a todos los actores sociales antes de tomar una decisión respecto a la modificación en la ley de alcoholes, donde se contempla cambiar el horario de venta de bebidas alcohólicas en restaurantes y establecimientos potosinos, pues se debe ser prudente y no tomar decisiones pensando sólo en el beneficio de unos cuantos.
Manifestó lo anterior el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC), Juan Carlos Banda Calderón, quien indicó que no se busca que haya una ley permisiva sino que sea integral, que realmente impulse a productores y comerciantes potosinos formales, pues estos son un aliado para el desarrollo ya que cumplen con la normatividad.
Consideró que dicha propuesta tiene varias aristas que deben ser analizadas con cada uno de los involucrados, porque “no se trata solamente de abrir de par en par los horarios para la venta”, sino que debe haber consciencia que una decisión de este tipo impactará en todo el estado.
“Los restauranteros potosinos pedimos a nuestros legisladores tomar decisiones en base a diagnósticos objetivos y precisos. Consideramos que pensar que la ampliación de horarios por sí misma generará un círculo virtuoso en la economía no basta, porque la iniciativa no distingue entre comercios establecidos o semifijos”, expresó.
Indicó que es necesario tener una mayor apertura en las diferentes actividades económicas y sociales, pues actualmente la entidad potosina está atravesando una etapa muy importante de crecimiento y desarrollo, pero esa apertura no debe ser a cualquier costo, por lo que las medidas que se implementen deben valorarse pensando en el bien de la comunidad.
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