Tras celebrar su última misa dominical en la Catedral Metropolitana, como representante de la Arquidiócesis de San Luis Potosí, el Arzobispo Emérito, Jesús Carlos Cabrero Romero, hizo un exhorto a las y los potosinos a no perder la esperanza ni la confianza de que vendrán tiempos mejores; asimismo, exhortó a la población a amar y vivir la vida con “muchas ganas”.
“¿A dónde vamos si ya no hay esperanza, si ya no hay confianza?, no es más que caer en un pesimismo y estar señalándonos los unos a los otros, pero ya no es tiempo de pesimismo ni de culpas. Ahorita es la oportunidad de que hagamos algo más, y que salga de nuestra voluntad, no queramos que todo nos caiga del cielo, hay que salir a luchar y no desesperarnos, con la confianza de que vendrán las cosas y que Dios dirá cuándo”, expresó.
El prelado potosino, manifestó que los buenos y malos momentos son oportunidades para aprender, pues “la vida es una escuela” que nos va formando como personas y como tal lleva un proceso, “no podemos improvisar”, sino que hay que prepararse y vivir con muchas ganas.
De igual forma, hizo un llamado a amar y embellecer nuestra tierra potosina, pues se necesita el trabajo y apoyo todos para construir un mejor San Luis Potosí, en beneficio de nosotros mismos, pero sobre todo de las nuevas y futuras generaciones.
“Potosinos amemos nuestra tierra, necesita de cada uno de nosotros, de nuestros dones y cualidades, vamos embelleciendo nuestras tierras, por más humildes y sencillos que seamos. No demos marcha atrás, caminemos hacia adelante, miremos al futuro, ¿cómo vamos a dejar sin patrimonio humano, espiritual y social a las generaciones que vienen? No se vale, ayudemos a construir un San Luis mejor al que nos tocó vivir. Hay que soñar y aspirar a lo está al alcance de nosotros”, apuntó.