La justicia tiene aroma de mujer

Durante 27 años de satisfactorias y enriquecedoras experiencias, la Magistrada de la Segunda Sala Penal de Poder Judicial del Estado, Olga Regina García López, ha tenido en su haber la toma de importantes decisiones que aunque en algunas el camino ha sido inhóspito, esto no incide en la convicción de servir en la difícil tarea de impartir justicia.

En amena plática con El Sol de San Luis en el marco de la conmemoración del Día del Juez Mexicano y en vísperas del Día Internacional de la Mujer, la Magistrada nos cuenta cómo ha sido para ella caminar en un ambiente preponderantemente marcado por los hombres.

Como mujer dentro de la procuración de justicia, comenta que fue algo difícil al principio que se le reconociera como mujer juzgadora, porque en diversos municipios se dudaba que pudiera desempeñar la labor, “sí me costó un poco que tuvieran confianza, tanto abogados litigantes como la población, sin embargo eso se ha venido superando poco a poco, aunque aún hay mucho que hacer para que las mujeres ocupemos esos lugares, pero es una evolución progresiva”.

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TRAYECTORIA

A lo largo de sus 27 años dentro de la procuración de justicia, se ha desempeñado primero como Secretaria de Estudio y Cuenta, posteriormente como Juez de Menor Cuantía, debiéndose trasladar a Ahualulco para ejercer, posteriormente concursó para Juez de Primera Instancia ocupando las adscripciones de Ciudad Valles, Rioverde, Matehuala y Juzgado de Justicia para Menores, Juzgado VI Penal y en el I y III Civil, y ahora como una reconocida Magistrada.

RIESGOS

Feliz al hablar de su profesión, la Magistrada Olga reconoce riesgos y momentos difíciles, “cuando uno resuelve en favor de una parte, la otra queda un tanto inconforme, como juez recibí amenazas sobre mi vida y la de mi familia, fue preocupante pero la tranquilidad es que uno resuelve conforme a derecho, y que cualquiera que revise esa resolución en juzgados federales o barras de abogados se convencerá que resolvió de forma correcta en estricto apego a derecho”.

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¿QUÉ HACE UN MAGISTRADO O MAGISTRADA?

Con amplia soltura, seguridad y emoción en sus palabras, la Magistrada García López detalla que su función consiste en revisar resoluciones de Primera Instancia tanto del sistema penal tradicional como el acusatorio como son audiencias orales, revisión de documentos de prueba, respeto a los derechos fundamentales de imputados y víctimas, que no se viole el debido respeto y respeto de garantías, en sí; “que las resoluciones hayan salido conforme a derecho, con que uno desarrolle su labor conforme lo marcan la ley, los lineamientos, los protocolos y los tratados internacionales, hay certeza de que se cumple adecuadamente”.

LA OTRA CARA

Al entrar de lleno al tema personal, a su situación como mujer, aflora una Magistrada sensible, humana, tierna y cariñosa, “me encuentro actualmente en proceso de adopción de dos niñas, para mí es una maravilla, ejercí mi labor como una mujer soltera procurando los derechos de los menores y adolescentes”.

“Ahora que soy mamá, cambia totalmente la perspectiva, me preocupa mucho más que se respetan los derechos de todos menores, mujeres y por qué no, también de los hombres, porque también hay muchos que son violentados y por su condición callan”.

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MAYOR SATISFACCIÓN; PRESENCIAR AUDIENCIAS

‘Evidenciando lo evidente’, para la Magistrada no hay mayor satisfacción que presenciar las audiencias de sus casos, y conocer la perspectiva de las dos partes, “darme cuenta, ver conocer, sentir el sentimiento que impera tanto en el imputado como en la víctima, eso me da la satisfacción de que escuche ambas partes y me permite tener la tranquilidad de que se resuelve adecuadamente”.

LA COMPLEJIDAD; LA RECONSTRUCCIÓN DE HECHOS

Hay reconstrucción de hechos que se realizan durante las madrugadas, en lugares inhóspitos, apartados, que aún con protección policíaca la población no siempre entiende lo que vamos a hacer, una parte está contenta y otra enojada y ven a uno con cierta reticencia”.

Asegura que esas experiencias son satisfactorias y enriquecedoras; “seguiré haciendo bien mi labor, y cada una de mis resoluciones”, en ese contexto destacó la importancia de la actualización, y preparación continua, “el derecho avanza”.

TAREA PENDIENTE, JUSTICIA PARA MUJERES

En cuanto a si se ha hecho justicia a la mujer, la Magistrada comenta que solo en algunos ámbitos, “aún hay mucha tarea por realizar, ha ido escalando cada vez hacia escaños más altos, pero mientras las mujeres seamos solidarias, mientras nosotras mismas no pongamos obstáculos a otras, eso permitirá que nos vean fortalecidas y con una expectativa de crecimiento, mi reconocimiento a las mujeres juzgadoras, trabajadoras que después de sus jornadas llegan a sus casas a atender una familia”.