Las críticas de Eugenio Derbez hacia los millenials hicieron eco en los potosinos, y así como hay quienes apoyan la idea del actor, productor y comediante, hay otros que consideran que está equivocado.
En un sondeo realizado por El Sol de San Luis a jóvenes y adultos, Diana, de 21 años de edad, indicó que al buscar empleo, una de sus preguntas sí sería respecto al salario, “creo que es importante porque tengo que ver por mis intereses y también darme cuenta de mi preparación y ver lo que tengo que ganar de acuerdo a mis conocimientos; y el horario también depende, por decir en la Zona Industrial te dan 700 pesos por 12 horas al día, no es justo”.
Donato coincidió con esa postura, “es importante saber a qué nos vamos dedicar, cuánto vamos a trabajar, no es por ser perezosos, flojos, ha de ser por algo que preguntamos cuál es el horario y el sueldo”, y además dijo considerar que Derbez forma parte “de esa bola” que pretenden manipular a la ciudadanía en tiempo electoral.
También Giovana consideró “primordial” saber el horario y el salario que se va a tener en un empleo para determinar si es o no una buena oportunidad.
Pero no sólo los jóvenes mostraron una opinión distinta a la del comediante, pues María del Carmen señaló que si bien puede ser cierto que hay jóvenes que buscan las cosas más fáciles, también es necesario ponerse en sus zapatos, “no sabemos las necesidades que puedan tener”. Indicó que hay casos en que los jóvenes buscan un empleo cuando aún son estudiantes, de ahí que quieren horarios accesibles, y además con el salario pagan sus estudios y apoyan a su familia, por lo que es importante para ellos saber cuánto van a percibir.
En ese sentido, manifestó que quizá el comediante no pasó por las mismas necesidades, aunado a que antes las condiciones de vida eran más fáciles, “como ya es una persona que ya es muy exitosa y no tiene esas necesidades, todo lo ve como que les tiene que costar”.
Otra mujer de nombre Carmen, también defendió a los jóvenes, pues cuestionó “cómo va a llegar usted a trabajar sin saber su horario, por ejemplo si entra a las 7 y la dejan salir a las 10 por no haber preguntado, claro que si usted llega a trabajar usted debe preguntar qué horario le van a dar; también debe preguntar cuánto le van a pagar porque a lo mejor él lo ve mal porque él ya tiene económicamente todo, pero nosotros no tenemos nada”.
Sin embargo hubo quienes apoyaron la crítica del comediante, como el señor Juan Manuel, quien señaló que no se les pueden tantas libertades a los jóvenes “porque al rato entran a trabajar y no quieren hacer las cosas”, agregó que deben realizar sus funciones sin reproches, “actualmente no quieren mover un dedo porque: no me corresponde; no estoy de acuerdo en que lleguen exigiendo eso y no trabajen como debe ser”.
Igualmente el señor Césareo indicó que al menos en su trabajo, el salario es en base a lo que demuestra que sabe hacer, por lo que pidió que los jóvenes demuestren lo que saben hacer para que entonces se analice cuánto pueden ganar.
Yolanda, estudiante de preparatoria, reconoció que hay jóvenes que llegan preguntando de cuánto es el salario, “creo que no está bien, porque lo primero que nos enseñaron es trabajar duro para conseguir lo que queremos”, y agregó que no se puede exigir un salario cuando no se sabe cuánto es lo que puede aportar como trabajador.