Ella es Montserrat con apenas 19 años cumplidos en el mes de enero de este año, acudió por primera vez a votar este primero de julio. Lo hizo con entusiasmo, pero también con cierta extrañeza hacia la desorganización del proceso.

Afirma haberse sentido emocionada de emitir el voto y a la vez lo observa con extrañeza.

Comenta que no pudo dormir por llevar a cabo su primera votación, aunque también se sinceró confesando haber sentido flojera después de conocer el panorama que permea en todo el país, sin embargo, algo interno la llamó para poder levantarse y salir a votar.

A través de los chats, sus compañeros de la escuela, quienes también se decían indecisos de salir a votar lo hicieron, pensando en una visión idealista del país.

En este primer encuentro con la democracia, también se espantó por la tardanza y desorganización que imperó en varias casillas instaladas en la ciudad.

Se siente raro, tanta desorganización en las casillas, cómo que los funcionarios querían hacer todo, pero fue bonito poder apoyar con mi voto