En San Luis Potosí es inviable construir viviendas de 400 mil o 500 mil pesos, por lo que una opción para la adquisición de vivienda económica, sería el otorgamiento de subsidios por parte del gobierno, indicó Luis Alberto Alvarado Moreno, presidente local de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI).
Alvarado Moreno manifestó que en San Luis Potosí se tiene un déficit de vivienda económica de al menos 5 mil unidades, con una oferta de menos de 600 viviendas económicas que se ubican casi en su mayoría en el municipio de Soledad de Graciano Sánchez, donde algunos desarrolladores ya habían adquirido terrenos a mejor precio hace años.
Destacó que la falta de vivienda económica provoca que las familias tengan que rentar, y en el peor de los casos, que vivan en condiciones de hacinamiento; a pesar de que son familias que tienen acceso a créditos del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), pero éstos están por debajo de los 600 mil pesos.
Explicó que este déficit “es causado por el alto costo de la tierra, si el desarrollador, el inversionista o el promotor llega, compra un terreno, por más barato que éste sea y sumas el costo de urbanización, el costo de los trámites y de los servicios, es inviable en San Luis Potosí construir vivienda de entre 400 y 500 mil pesos, por eso el déficit de vivienda, por la poca rentabilidad”.
En ese sentido, indicó que en 2020 el Gobierno del Estado de Guanajuato signó un convenio con la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi) de aquella entidad para destinar 100 millones de pesos en incentivos para la construcción de vivienda económica, así como subsidios a familias para la adquisición de viviendas de hasta 605 mil pesos principalmente en las ciudades de León, Irapuato y Celaya.
Sugirió que dicho modelo pudiera replicarse en San Luis Potosí, donde los subsidios podrían ser destinados a las familias para que puedan adquirir viviendas de mayor valor, adicional a incentivos fiscales o subsidios para la compra de materiales de construcción y mano de obra para los desarrolladores que construyan vivienda económica.