La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana capitalina desplegó un operativo para meter en cintura a lavacoches que operan en el Centro Histórico, y por lo pronto detuvo a cuatro de ellos por ser sorprendidos ingiriendo bebidas alcohólicas o estupefacientes.
Recientemente la dependencia municipal había iniciado un supuesto padrón de “franeleros” y el último dato que se obtuvo es que se habían registrado 29 personas, de las que se contaba con sus generales; no se aclaró si los detenidos forman parte de esa lista.
El operativo, encabezado por elementos de la Guardia Municipal y no de la Policía Vial y de Movilidad, se aplica para garantizar el orden y la seguridad en la vía pública, que incluye un llamado al respeto de las normas y reglamentos por parte de los “franeleros” que realizan su actividad en la zona. El apartado de cajones de estacionamiento no está permitido.
El dispositivo, se aseguró, “se realiza con pleno respeto a los derechos humanos de las personas dedicadas a esta actividad y, al mismo tiempo, en atención a los ciudadanos que reporten cualquier conducta contraria a derecho”.
El personal involucrado en el dispositivo está conformado por los agrupamientos ciclistas y personal de pie-tierra que realiza recorridos en las zonas de mercados, comercios y calles aledañas a las plazas del Centro Histórico.
No se detalló cuánto tiempo durará ni si se ampliará a horarios nocturnos cuando operan antros y otros centros nocturnos; tampoco se aclaró si se ampliará a otras zonas donde se han presentado conflictos con quienes se dedican a este oficio, como ocurre en los alrededores de hospitales.
Así, durante las primeras horas del dispositivo, se registraron cuatro remisiones para sanción administrativa por faltas al artículo 10 fracción VII y VIII del Bando de Policía y Gobierno, relacionadas con el consumo de bebidas alcohólicas o estupefacientes en la vía pública.