Aunque en San Luis Potosí se han perdido casi 25 mil empleos en todo el estado principalmente de los sectores de transporte, comercio, servicios y construcción, la industria logró mantener sus fuentes de trabajo en un 80-90 por ciento, aproximadamente.
Así lo señaló Emilio de Jesús Ramírez Guerrero, secretario general de la Confederación de los Trabajadores de México (CTM), en su intervención durante el diálogo “El Futuro del Trabajo”, que llevó a cabo el Instituto de Política Laboral A.C. (IPL) junto con representantes de los sectores productivos de la región Centro-Bajío-Occidente.
El líder cetemista destacó que, desde el inicio de la pandemia del Covid-19, la prioridad para todos los empresarios potosinos siempre ha sido proteger y mantener las fuentes de empleo, por lo que a principios de abril establecieron convenios con sus sindicatos y trabajadores, donde en algunos casos se acordó que se pagaría el 70 u 80 por ciento de los salarios.
No obstante reconoció que lograr estos convenios fue un tanto complejo, porque dar a conocer a los trabajadores esta medida y que la aceptaran no fue nada sencillo, pero al final logró funcionar al menos durante los meses de abril y mayo.
“Estamos haciendo esfuerzos para mantener la mano de obra, las empresas quieren conservarla porque es mano de obra calificada, preparada y con experiencia, entonces un reconocimiento muy fuerte para los empresarios de SLP porque entendieron que esa mano de obra no podía ser desechada sino que se tenía que conservar, para que en el momento del arranque y el retorno de labores estuviera dispuesta, y así fue”, expresó.
De igual forma, dijo que esperan que al cierre de este mes el 90 por ciento de las empresas hayan regresado ya a sus actividades de forma gradual, con los protocolos sanitarios correspondientes para garantizar que el retorno sea tranquilo, seguro y que no ponga en riesgo la salud de los trabajadores y sus familias.
Finalmente reconoció que la crisis económica que se está viviendo, derivado de la pandemia, es la más grande que se ha tenido, la cual ha hecho vulnerable el empleo. Por cada fuente de trabajo que se pierde se debilitan las instituciones sociales del país, así como el desarrollo y el crecimiento, por ello la insistencia de que los tres niveles de gobierno apoyen a los sectores productivos para cuidar los empleos, sin embargo “lamentablemente tan sólo el gobierno del estado ha respondido al llamado de los empresarios potosinos”.