De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, (OMS), una persona requiere de cien litros de agua al día (5 o 6 cubetas grandes) para satisfacer sus necesidades, tanto de consumo como de higiene, hoy el Instituto Mexicano del Seguro Social, (IMSS) en San Luis Potosí, recomienda a la población general a mantener una buena hidratación, continua y adecuada para evitar riesgos a la salud, sobre todo los identificados con el tipo neurológico y metabólico.
Juan Alberto Martínez Andrade, coordinador auxiliar de Gestión Médica de la Jefatura de Prestaciones Médicas en la entidad, indicó que cuando las personas no están bien hidratadas, las repercusiones se presentan generalmente como el dolor de cabeza, náuseas, mareos y calambres.
La sugerencia es hidratarse con agua y bebidas con carga electrolítica para alejarse de enfermedades tan conocidas como la diabetes o el sobrepeso.
Es importante considerar que, ante la temporada en que nos encontramos, los riesgos de presentar padecimientos son mayores, pues conlleva una serie de complicaciones, calificadas de leves a graves, que podrían poner en peligro la vida de cualquier ser humano, debido a un desequilibrio hidroelectrólico.
"Puede haber las alteraciones metabólicas, éstas se presentan con incremento del nivel de glucemia en el caso de pacientes con diabetes; desequilibrio en la presión arterial, por lo que es importante ingerir agua y bebidas electrolíticas, además de evitar los rayos de sol directamente, entre otras recomendaciones".
Estas recomendaciones se extienden a las personas adultas mayores y población infantil principalmente, por eso es posible que por la falta de hidratación, se ocasionen problemas en la piel, como resequedad e incluso dermatitis.
Es así, que se indica que se debe favorecer durante el día, el consumo constante de líquidos, de preferencia que tengan una carga electrolítica suficiente para mantener un balance y que además estén al alcance, al tiempo que recordó que se cuenta con sobres de Vida suero oral en las Unidades de Medicina Familiar del Seguro Social y en los consultorios PrevenIMSS.
En caso de no tener acceso a él, se puede elaborar suero en casa, y se recomienda utilizar un litro de agua hervida que esté en un recipiente limpio, agregar dos cucharadas soperas de azúcar y una cucharada cafetera de sal; para agregar sabor se pueden utilizar limones o naranjas, para de esa forma, inhibir la posibilidad de deshidratación.