- No tengas miedo a que te transforme, levántate!!!, aseveró el jerarca
Con imponente y desbordante fervor se vivió la magna Festividad en honor a Nuestra Señora de Guadalupe en la hermosa Basílica que lleva su dulce advocación.
La Misa solemne fue presidida por el Arzobispo de San Luis Potosí, Mons. Jesús Carlos Cabrero Romero, acompañado del Rector del
recinto mariano, Pbro. Gabino Medina Portales, del Pbro. Fernando Ovalle González, y el P. Rodolfo Duarte Ramírez.
En su homilía el jercarca indicó:
"La Virgen quiso quedarse con nosotros para poder tocar las puertas de nuestro corazón para ver quién de nosotros se atreve a recibir el amor de Dios destinado a los hombres. Ella trasmitió el amor ante muchas barreras.
Por qué nosotros entonces le ponemos tantas barreras?".
"Por qué sigue cerrado nuestro corazón al amor de Dios?".
"Tienes miedo de que el amor de Dios por medio de María te trasforme?"
"Ella nos pide un corazón generoso, atrevido, que entraga todo".
"Cuántos corazones están vacíos!!".
"Los ojos de Ella están puestos en tí, siempre. Te invito a que abras tu corazón a María, para que Ella te transforme, te cambie, te haga nacer de nuevo".
"Dios no quiere la esterilidad para ningún hombre ni ninguna mujer, pero depende de cada uno de nosotros el que aceptemos el amor que Ella nos anuncia".
"Es Ella quien llena nuestro corazón de todos esos vacíos y desilusiones". "Tal vez te dejaron esas desilusiones no creyente. Te estás consumiendo, estás como muerto en vida, pero es María la prueba de que el amor de Dios es verdad. Ella Quien es de nuestra raza, fue fiel a esa tarea y misión que Dios Padre le encomendó y nosotros somos testigos de su amor".
Agregó el jercarca:
"Muchas gracias Dios por darnos una Madre que nos dejaste en San Juan Diego, porque a veces vivimos en la orfandad, pero somos Tus hijos y Ella es la transmisión fiel del amor de Dios".
"Recordemos que aunque seamos pecadores Dios nos ama, no nos juzga, como muchos juzgaron a la mujer adúltera, Él no la condenó.
Más tarde la dignifica, le dió su lugar y la hacía digna de ser amada y respetada".
"Éste es el juicio que Padre Dios ha hecho llegar a los hombres; juicio que todavía no lo podemos entender y seguimos atreviéndonos a juzgar, a criticar, cuando Dios vino a traer la paz, el perdón y el bien".
"Dios sigue ausente de nuestras familias y ambientes, por eso es importante rescatar el juicio de Dios".
"Levántate!!!, yo no te condeno, le dijo a la adúltera que se convirtió.
Por qué ese juicio de Dios en la Santísima Virgen??. Ella nos ofrece un amor que consuela, que anima.
No veamos la celebración del 12 de Diciembre de aquí a Ella, sino veámoslo de Dios Padre miseriordioso hacia nosotros, pues a través de una Madre nos demuestra su amor infinito hacia cada uno de nosotros".
Concluyó el jerarca su mensaje Guadalupano.
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