La iglesia católica potosina sostendrá una reunión el próximo lunes con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para indagar sobre la subasta que se realizó en Nueva York de un libro originario del convento de San Francisco, pues hasta el momento se desconoce quién lo comercializó y cómo es que dicha obra llegó hasta aquel lugar.
El arzobispo de San Luis Potosí, Jesús Carlos Cabrero Romero, manifestó que es de interés de la iglesia analizar este caso y conocer “cómo fue que salió de donde estaba”, para determinar si el libro habría sido prestado y perdido, o si fue directamente sustraído del convento.
Señaló que se ha vuelto común el robo de arte sacro en las iglesias, ya que hay obras o pinturas del siglo XVII que se han llevado, incluso hasta las hostias consagradas, el sagrario y los copones han sido sustraídos de los templos. Indicó que por ello le solicitan a cada párroco que los catálogos de las pinturas y de los objetos valiosos estén muy definidos para en caso de robo poder reportarlo a las autoridades.
“Más que robo de arte sacro es profanación puesto que a veces se están llevando del Sagrario mismo hasta los copones con el Santísimo Sacramento; se ha hecho muy común porque creemos que está a merced, es clásico un atraco porque se esconden dentro de los templos y salen con cosas, por lo general buscan dinero o algo para vender”, expresó.
Por su parte el vocero de la arquidiócesis, Juan Jesús Priego Rivera, comentó que ciertamente San Luis Potosí es dueño de varios “tesoros” que son objeto de la codicia de muchas personas, y que saben que algunos objetos son muy bien pagados en casas de subastas, y apuntó que este libro era un tesoro debido a su valor histórico para nuestra región por ser una traducción al náhuatl para la evangelización de los primeros mexicanos.
“No tenemos noticia de quién lo está subastando, habría qué ver cómo se hizo de ese ejemplar, y considero la casa de subastas debería pedir la acreditación de la propiedad, a quién se lo compraste, cómo te hiciste de él, esa es una explicación que debe de dar el personaje que lo va a vender”, añadió.