Ninguna institución médica tendrá capacidad de manejar lo que viene en los próximos 30 años en lo que respecta a enfermedades oncológicas, si no se hacen los cambios que se requieren en la materia, el cáncer es una enfermedad que se ha vuelto más común y es uno de los padecimientos crónico degenerativos no transmisibles más agresivos.
Por décadas, las epidemiologías de las enfermedades, antes pandemias, han ido cambiando y evolucionando, y en un momento las pandemias se controlaron con la mejora en las tecnologías, por lo que poco a poco los pacientes han llegado a vidas más longevas lo que ha provocado que un 70 por ciento de los pacientes con ese padecimiento tengan más de 70 años de edad, el problema es el estilo de vida que ha ido adoptando la población.
“El cáncer se origina de alteraciones en los genes, todos tenemos genes que favorecen el desarrollo de tumores, y también genes que atacan o reparan a esos genes, y cuando algún factor externo que altere el ataque a esos genes es cuando se desarrolla la alteración”.
Así lo destacó personal especialista del área de Oncología del Hospital de Especialidades Médicas de la Secretaría de la Defensa Nacional, luego de destacar que en lo que respecta al sistema de salud de la SEDENA, éstos están realizándose, dado el alto número de pacientes que se registran tanto derechohabientes como población en general, cabe destacar que los servicios médicos que otorga la SEDENA están abiertos a población en general y son altamente demandados.
Los cambios a que hace referencia el personal militar son en varias vertientes, la parte troncal se conforma de auxiliares en la atención del manejo de pacientes, clínica del dolor, cuidados paliativos, quitar los síntomas para evitar el dolor que es el primer síntoma fuerte, la constipación, se cuenta también con una área de psicología y tanatología y nutrición para pacientes con cáncer.
Un factor importante en las instalaciones médicas oncológicas es además de la adquisición de equipos médicos de primer mundo, para mayor calidad en la atención médica a pacientes con cáncer, es el color naranja con que se visten paredes, módulos y mobiliario.
“Este color nos permite disminuir la depresión en que caen los pacientes con cáncer, es necesario para ellos mucha luz, es importante contar con individualidad en el edificio, que en la pena del dolor la familia se sienta en privacidad aunque estén dentro de un hospital, eso permite mayor desahogo”.
Dentro de la modernidad y equipamiento para hacer frente a los retos del futuro en materia de salud, la SEDENA adquirió entre 2012 y 2018, dos mil 885 nuevos equipos médicos.
Asimismo, construyó cinco hospitales regionales y de especialidades; en Mazatlán, Monterrey, Mérida, Puebla y Ciudad de México, además del Centro de Detección Oportuna de Cáncer de Mama, así como al creación de cuatro especialidades médicas.
De igual forma se reclutó a 778 especialistas y se contrataron entre 2012 y 2018, a 2 mil 846 profesionales del ramo.