La intención de formar grupos de autodefensa, son muestra de la desesperación que existe entre la población ante la inseguridad que se vive, consideró Tomás Cruz Perales, vocero de la Arquidiócesis de San Luis Potosí.
Luego de que el domingo se llevó a cabo una jornada de oración por la paz y que este martes se hicieron repicar las campanas de las iglesias en el aniversario luctuoso de los sacerdotes jesuitas Javier y Joaquín asesinados en Chihuahua, Cruz Perales destacó que las autoridades encargadas deben reforzar sus acciones en el combate a la inseguridad, “espero que la violencia o el crimen no esté rebasando a las instituciones, sería lamentable que haya superado a las instituciones”.
Indicó que las estadísticas son evidencia de que el crimen ha crecido en el país, aunque evitó señalar si esta alza se encuentra relacionada a la estrategia de “abrazos, no balazos” del gobierno federal, o si es porque la estrategia que han aplicado los gobiernos municipales, estatales y el federal, “tenga algo voluble que ha llevado al crecimiento de la violencia”.
Mencionó que además, el surgimiento de grupos de autodefensa es consecuencia de la desesperación que existe entre la población ante los índices delictivos, pues incluso parafraseó el eslogan de una compañía telefónica y señaló que ahora “todo México es territorio del crimen organizado, hay estadísticas que hablan de que en el 75% del territorio tiene dominio el crimen”.
A pesar de ello, destacó que los grupos de autodefensa son ilegales, además de que pueden generar más violencia, ya que en ocasiones llevan consigo la confrontación y no la paz que se busca, “la sociedad no tiene porqué tomar la iniciativa de hacer justicia por su propia cuenta, para eso están instituciones, y deseamos que éstas se fortalezcan para vencer eso”.
Finalmente, Cruz Perales mencionó que es necesaria la participación de todos para recuperar la paz, pues la violencia no sólo es generada por los grupos delictivos, “también está la violencia doméstica”.