El Instituto de Geología de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí lleva al menos dos décadas investigando las grietas derivadas de una falla geológica que atraviesa la zona, incluyendo las más recientes.
El investigador jubilado de esa institución, el ingeniero geólogo José Luis Mata, participa en el más reciente estudio de las que fueron advertidas en días pasados, en dos caminos y que fue necesario impedir parcialmente su tránsito como medida preventiva.
En opinión personal, señaló que las lluvias recientes contribuyeron a la aparición de más fallas, que es posible que se amplíen más, inclusive que se ensanchen y se hagan más profundas cuando termine la temporada de precipitaciones.
Sin embargo, resaltó que esa zona está bajo estudio desde hace muchos años, e inclusive, ya está considerada en el Atlas de Riegos.
Consideró importante que las autoridades tomen providencias; actualmente, están a la espera del reciente estudio del Instituto de Geología.
En ocasiones anteriores, ha sido necesaria la reubicación de algunas familias; sin embargo, la delegación de Bocas hasta el momento no ha manifestado si existe riesgo para algún asentamiento.
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La demarcación tiene ubicadas recientes grietas en las localidades de Zamorilla, La Morita, Pozo Dos, La Manta, San Rafael 2 y El Chaparral.
Cada grieta supera los dos kilómetros de longitud, extendiéndose a través del terreno local, con una anchura que varía entre 10 centímetros y 1.5 metros, lo que indica una amplia gama de tamaños que pueden afectar diferentes áreas de manera diversa, y con una profundidad desde apenas 10 centímetros hasta 5 metros.
El ingeniero Mata señaló que el problema principal se presenta en dos lugares, uno en la carretera de la delegación de Bocas rumbo a Arista, donde un carril ya está hundido, y el otro estaría a punto de colapsar.
Otro lugar es una camino de terracería, donde también la mitad del camino ya estaba a punto de colapsar. "Ahí sobre todo porque pasa mucho vehículo de localidades cercanas, zonas de cultivo...", explicó.
Dijo que se ha hablado con los habitantes cercanos sobre los riesgos, pero aún insisten en atravesar por ahí.
Con respecto a otras grietas, se sabe que se ubican en campo abierto.