La LXII Legislatura del Congreso del Estado aprobó reformas a la Ley de Transporte Público del Estado de San Luis Potosí, con el objetivo de regular el derecho de accesibilidad al transporte público de las personas que tienen como apoyo un perro guía o animal de servicio.
Con esta modificación, se garantiza el derecho a las personas que requieren de un animal de servicio, que se les permita permanecer con ellos, al momento de acceder al uso de Transporte Público, sin ser sujetos de restricción alguna.
De esta manera, se establece que “Los perros de asistencia de las personas con discapacidad deberán ir junto a ellas todo el tiempo. El Ejecutivo del Estado al otorgar, refrendar o modificar las concesiones para la prestación del servicio público de transporte colectivo, observará que en cada ruta las unidades correspondientes a la misma, reúnan las especificaciones señaladas en el presente artículo”.
Además, se indica en el artículo 86 Bis que “Queda prohibido a los operadores del transporte público de cualquier modalidad, obstaculizar, impedir o negar el servicio público de transporte a adultos mayores, niños, personas con discapacidad, y mujeres embarazadas. Por ningún motivo se podrá negar el servicio a la persona debido a la presencia de un perro de asistencia”.
En la exposición de motivos de este dictamen, se indica que de acuerdo al Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad, “los perros guía no son mascotas, son animales de servicio que desempeñan una labor de asistencia muy importante para las personas con discapacidad visual, ya que prácticamente se convierten en sus ojos, ayudándole a evadir una infinidad de obstáculos, que podrían representar un peligro”.
Cabe señalar, que estos animales tienen características que los hacen diferentes a una mascota normal, son seleccionados cuidadosamente, no todos los perros cuentan con la cualidad y temperamento adecuado para ser un perro guía, están preparados para andar en las calles, y hacer su labor que es evitar a toda costa que le suceda algún accidente a su amo con discapacidad y están dispuestos a dar la vida por sus dueños.
Los perros guías, no representan ningún peligro para los demás usuarios del transporte público, pues son de carácter dócil, fácilmente adiestrables, sin timidez ni cobardía, con actitud de seguridad ante circunstancias extrañas, saben subir a transportes públicos, encontrar puertas, escaleras, banquetas, sillas, y tener un comportamiento ejemplar en lugares públicos.
Por ello, es importante atender a establecer reglas claras que realmente hagan valer el acceso al trasporte público, sin distinción, discriminación y otorgando las facilidades necesarias para el pleno ejercicio de sus derechos.