- “Ya basta de asaltos, estamos hasta la madre”, exclaman centenares de motociclistas ante el asesinato de uno de los suyos.
- Caos vial en la zona oriente de la ciudad por manifestación de los repartidores.
No hubo competencia, los colores de Rappi, Uber Eats y Didi Food, se fundieron en uno sólo en el estacionamiento de Plaza Sendero, en la zona oriente de la capital potosina.
Los motociclistas, más de 300, convirtieron sus mochilas de reparto en altares que mostraban la fotografía de José Alejandro, asesinado a tiros en la Unidad Habitacional Pavón cuando acudió a entregar un pedido de comida. Sin misericordia, los delincuentes le quitaron su mochila, el envío, le quitaron la moto y la vida.
Además las mochilas mostraban leyendas: “Ni un repartidor menos", "Exigimos Justicia!".
Ya no queremos violencia, da coraje, uno sale para buscar la papa, yo salgo con mi mamá, imagínese yo hubiera podido tomar ese pedido, ¡Nos hubieran matado! que tengan corazón, que no sean inhumanos, nosotros lo único que hacemos es trabajar, ya, por favor, cero delincuencia
Luis Alfonso, repartidor de Uber
Alrededor de las 17: 20 horas de la tarde, los repartidores encendieron motores y cumplieron su amenaza, bloquearon en su totalidad la carretera federal México 57, tramo San Luis Potosí- Villa de Pozos, lo bloquearon todo. Carriles centrales y pasos laterales, de ida y de venida, dejando atrapados a centenares de automovilistas y choferes.
La turba enardecida se colocó sobre la superficie de rodamiento lanzando consignas: ¡Justicia, justicia, justicia!
“Queremos que se haga justicia, que se castigue a los responsables, que no haya impunidad; que sea un ejemplo de que, quien comete un delito en San Luis Potosí, es castigado”, señaló Martín Lucio, repartidor de Didi Food quien con lágrimas en el rostro lamentó la partida de su compañero José Alejandro quien por segundos le ganó el fatal pedido en Pavón.
¡Pude haber sido yo, pude haber sido yo!, sollozaba.
Repartidores de Uber Eats pidieron a las autoridades su intervención, “el que la hace, la va a pagar, eso esperamos los potosinos, eso esperamos la gran familia de repartidores”.
Tras el bloqueo algunos automovilistas descendieron de sus vehículos para dialogar con los manifestantes para que les permitieran continuar con su camino, pero no hubo respuesta positiva.
En un golpe de realidad, una persona originaria de Guanajuato le suplicaba a los repartidores le dieran el paso, “vengo con mi familia vamos a casa, transitar en la noche por las carreteras de Guanajuato es un suicidio por la inseguridad, por favor denme chance”. Recibió un no rotundo. "Mejor súmate, eso estamos exigiendo, seguridad”, le respondieron.
Los repartidores sacaron su dolor con la manifestación, se convirtieron en un solo San Luis Potosí para mostrar su indignación ante la violencia.
La consignas seguían y el bloqueo también.
Comida Sí, Asaltos No”, “Esta lucha es por la seguridad de todos
Entre los motociclistas, uno de ellos, Luis Mendoza, alzó la voz..
Nos duele mucho, yo quiero que los potosinos, todos, nos acompañen a reclamar nuestros espacios, que pongamos en jaque a los delincuentes y que exijamos a las autoridades porque nos han fallado
Luego de dos horas de bloqueo, funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública llegaron al sitio para dialogar con los manifestantes.
Tras casi tres horas de bloqueo, con la promesa de fortalecer el tema de la vigilancia y la seguridad, los motociclistas se fueron a seguir con su labor, que a últimas fechas se ha convertido en un trabajo de riesgo.
Esperan que la muerte de José Alejandro no haya sido en vano y que los responsables sean castigados.
Los repartidores mostraban cartulinas con las leyendas: “Ni un repartidor menos", Exigimos Justicia!
Consignas en el bloqueo de la carretera México 57
Los repartidores sacaron su dolor con el bloqueo, se convirtieron en un solo San Luis Potosí para mostrar su indignación ante la violencia.