Con la temporada de calor se han disminuido los precios de las frutas tropicales, lo que a su vez, genera un repunte en ventas, indicó Pablo Martínez Rosales, asesor general y jurídico del Patronato del Centro de Abastos.
En Exclusiva para El Sol de San Luis, Martínez Rosales señaló que durante la temporada de calor suelen incrementar las ventas de las frutas tropicales, pues además de que son meses en los que se obtiene la cosecha, sus precios son más bajos, “están más baratas para que se consuman”.
Y es que explicó que con las altas temperaturas es difícil la conservación de las frutas, pues algunas de ellas entran en descomposición inclusive si se guardan en el refrigerador, “lo que es el melón, la sandía, no se pueden almacenar, no se pueden refrigerar porque se echan a perder de todos modos”.
Al respecto, recomendó a las familias aprovechar las frutas de temporada para preparar aguas frescas de fruta natural.
Mencionó que frutas como la piña, la sandía, el melón y las jícamas, que son las frutas tropicales, antes se encontraban en un precio promedio de 25 pesos el kilo, y actualmente se encuentran entre 10 y 15 pesos el kilo.
Esto ha repercutido en un aumento de 90% en las ventas de dichos productos, “ha impactado en el Centro de Abastos que las frutas tropicales hayan bajado tanto de precio, porque se vende mucho más, tienen una aceptación total”.
Martínez Rosales manifestó que actualmente se cuenta con disponibilidad de frutas tropicales, y generalmente es así durante los meses de abril, mayo, junio y julio, “hay suficiente abasto de mercancía”.
Y mientras se incrementa el consumo de frutas tropicales, disminuye el de productos que no son de no son de temporada, por ejemplo las manzanas y las frutas finas, pues algunas, al estar fuera de temporada o tener mayor problema para su distribución, suben de precio, por lo que la población opta por aquellas que están a más bajo costo.