“El Mijis” regresó a las calles en la colonia Las Piedras, donde se hizo chavo banda, forjó su activismo y se hizo líder. Fue recibido entre mezcal, aguardiente, caguamas, aplausos y lágrimas.
Sus restos estaban en un ataúd, pero su carisma, su espíritu y la fuerza que siempre lo acompañó, estaban en el ambiente, permeaban entre los poco más de 100 amigos y familiares que, destrozados, escuchan a todo volumen la música que artistas urbanos le compusieron y otras con letra de triste despedida.
A casi 30 grados centígrados, las lágrimas se secaban pronto antes de abandonar el rostro de quienes sufrían la partida de su amigo, de su vecino en algún tiempo, del joven inquieto que fue parte de esas calles, de esas noches de “rocazos” y “petardazos”, de quien fue apodado también “Pedro Piedras”, de quien construyó una vida dedicada a la lucha social a costa de su propia tranquilidad y la de los suyos.
Cuando la lujosa carroza apareció a lo lejos con luces estrobóticas en la parrilla, la banda de Las Piedras le metió watts al sonido, destapó las cervezas frías y se avalanzó sobre el ataud, para cargarlo e iniciar un recorrido fúnebre breve hasta el lugar donde quizá, inició su sueño de ayudar a los demás.
La incursión reciente del Mijis en la política generó una ola de condolencias, precisamente de esa clase a la que siempre enfrentó y combatió con ideales. Logró triunfos históricos como la aprobación de los matrimonios igualitarios, caravanas a favor de la paz, le puso luz a la búsqueda de personas desaparecidas en la frontera norte…y más.
En esas andaba, en su activismo, cuando el 3 de Febrero sufrió un accidente que le costó la vida, según dicen las versiones oficiales. Sus restos llegaron a San Luis la madrugada de este jueves, con musica de mariachi y sus cercanos; después del medio dia fue llevado a su domicilio y de ahí a una misa, precisamente en la parroquia de Las Piedras.
La cerveza arrojada sobre el ataúd fue un ritual de despedida, de dolor, de un hasta siempre por el amigo, por el compa, por el líder, por “El Mijis”.