De ser necesario, se deben hacer nuevos estudios de impacto ambiental y compromisos serios de inversiones en vialidades que faciliten la movilidad, antes de urbanizar los terrenos de la Minera México, ya que se trata de una zona muy estresada en términos de vialidad, dijo el diputado Mauricio Ramírez Konishi.
“Se debe corroborar que realmente los trabajos de saneamiento y de encapsulamiento de los elementos químicos que estuvieron durante tantos años se hayan neutralizado y un tema mayor es que haya un compromiso del desarrollador de generar infraestructura vial, que sea serio”, expuso.
El diputado integrante de la Comisión de Desarrollo Territorial Sustentable del Congreso del Estado, señaló que ya de por sí en este momento es muy complicado transitar por esa zona, sobre todo en la parte final del rio Santiago, lo que se complicará con un proyecto inmobiliario si no se tiene la solidez vial de puentes, pasos a desnivel y otras vialidades.
En este escenario, es importante peritaje neutral para garantizar que realmente se esté en condiciones de habitabilidad y que no se corre ningún riesgo biológico; las autoridades deben autorizar el proyecto siempre y cuando se tengan servicios de agua, drenaje, luz, escuelas, supermercados, acceso vial, etcétera.
“Si no se toman medidas como ocurrió en El Pedregal, donde hay una sola entrada y salida con una pendiente tan peligrosa, que generó un brutal y trágico accidente hace unas semanas, se pone en riesgo a la ciudadanía, por eso es importante que haya garantías porque una cosa es prometer un puente y otra cuándo se hará”.
Ramírez Konishi afirmó que hace tiempo se invirtió en la movilidad, pero San Luis tiene graves cuellos de botella que generan pérdidas de tiempo en el traslado; el anillo periférico poniente, tiene topes a la altura de la Cañada de Lobo y el puente de la FENAPO que no se puede concluir, cuando es vialidad en buenas condiciones podría desahogar el mismo tráfico que la Salvador Nava.