Es importante que la estimulación temprana comience desde el embarazo para fortalecer las habilidades de madres, padres y/o cuidadores principales, para que hagan un ambiente seguro y estimulante, así como facilitarle a su hija o hijo el descubrir su entorno, responder a sus necesidades y establecer relaciones basadas en el cariño.
En las diferentes Unidades de Primer Nivel de Atención de los Servicios de Salud de San Luis Potosí, se pretende apoyar la crianza y la estimulación en cuidadores principales de niñas y niños, por eso trabajan en la creación de talleres que ayuden a mejorar la capacidad de aprender, resolver problemas y relacionarse con los demás.
Ana Rosa Castillo Palencia, responsable Estatal de Desarrollo a la Infancia de los Servicios de Salud, informó que durante el 2023 se otorgó al menos una sesión de estimulación temprana a 4 mil 552 niñas y niños, lo que correspondería aproximadamente al 50 por ciento de consultas de niño sano atendidas; así mismo, además de los cuidadores que asistieron a estos talleres, se orientaron en temas de estimulación a 7 mil 486 personas.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, OMS, el periodo comprendido desde el embarazo hasta los primeros tres años de vida, es fundamental para el cerebro, pues este crece de manera sorprendente, lo que determina el desarrollo cognitivo, social y emocional; así como
El sector salud emite las siguientes recomendaciones para mujeres embarazadas del quinto al octavo mes de gestación, pues a partir del segundo trimestre, el bebé es capaz de oír, sentir, moverse y recibir expresiones de amor, por lo que de preferencia debe estar seleccionado el nombre que se le va a poner: “se debe inicia poniéndose cómoda, sentada o acostada y coloca las manos sobre el vientre para que te sienta. háblale, trata de platicarle de manera cotidiana, es importante interactuar con ella o él, acariciándote el vientre, dándote masajes con la yema de los dedos (de forma circular, alrededor, del ombligo hacia adentro y hacia afuera), haz presiones ligeras con uno o dos dedos; si prefieres acompáñalo de música relajante”.
Otra actividad, es hacer ruido alrededor del vientre. Se puede utilizar una sonaja, cascabeles, objetos pequeños en un recipiente de plástico. Hazlo en diferentes partes de tu vientre para llamar su atención.
Con estos ejercicios, se están estimulando varias áreas: la capacidad de percibir la luz (área visual), el sentir presión, contacto o caricias (área táctil), el distinguir sonidos (área auditiva), identificar cambios de posición o movimientos (área vestibular) y en especial el área afectiva porque comienzas a generar vínculos de confianza al hacerlo con amor y cariño.
Estas actividades deben integrarlas a su rutina diaria, pues a través de la repetición, el cerebro logra alcanzar ese desarrollo; además de incluir a otros miembros de la familia en la práctica. Recuerda, si estás embarazada, acude puntual a tus citas de control-prenatal.
Es importante acudir al Centro de Salud más cercano para acceder a estas acciones que son totalmente gratuitas.