La llegada de nuevas inversiones a San Luis Potosí ha absorbido parte de la mano de obra de otros sectores, tal es el caso de las constructoras quienes tienen que lidiar con el problema del déficit de personal en sus empresas, principalmente en la obra pública pues es donde más están batallando para completar sus plantillas laborales.
Así lo señaló el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Marco Antonio Uribe Ávila, quien indicó que aunado a esto los costos en los materiales se han encarecido, lo cual les afecta porque muchos trabajadores se quedan acostumbrados a que en una obra les pagan bien unos meses y cuando inician otro trabajo los sueldos no son los mismos.
“También hay escases de mano de obra, yo creo que mucho personal obrero de la albañilería o de la construcción ha optado por irse a las plantas que llegan, éstas absorbieron todo ese personal de la construcción, entonces en lo que es la obra pública estamos batallando con la mano de obra porque no hay mucha”, comentó.
Detalló que actualmente el sector de la construcción está pagando 2.5 por ciento arriba del salario mínimo, ejemplificó que a la semana un albañil está ganando alrededor de dos mil 500 pesos y un ayudante mil 400 pesos, más las prestaciones de ley que se otorgan como la seguridad social. Recordó que el salario mínimo actual ronda los 88 pesos y multiplicado por los siete días de la semana no alcanza ni los 700 pesos, en ese sentido expresó que son buenos los sueldos que se pagan en una obra.
El empresario manifestó ante la falta de mano de obra, los constructores también se ven en la necesidad de contratar gente externa a la zona metropolitana, explicó que cada empresa busca la manera de cómo atraerlos y cómo brindarles algún lugar para que puedan quedase, así estos no tendrían que estar yendo y viniendo; sin embargo reconoció que esto también implica un gasto para ellos el cual se tiene considerar dentro del costo de la obra.