Es importante que la sociedad civil se vincule con las mujeres que ocupan puestos de liderazgo para transformar la cultura de discriminación y misoginia, indicó Marcela García Vázquez, presidenta de la asociación civil Nueva Luna.
Luego de que se dio a conocer la intención de que la violencia política contra la mujer se considere dentro del Código Penal y la Ley Electoral para establecer sanciones hacia los agresores, la activista indicó que ya era necesaria dicha iniciativa, “es urgente porque en los últimos meses hemos visto cómo se ha agudizado mucho la violencia política contra las mujeres y no hay quien ponga freno”.
Lamentó que en la sociedad mexicana aún se ve como “normal” cada una de las agresiones a la mujer, “lo repetimos, lo transmitimos y vamos contribuyendo a que esta violencia sea normal y que afecte poniendo en riesgo a las mujeres”.
Al respecto, destacó que si no se conjuntan esfuerzos entre las autoridades y la sociedad civil, no se va a poder avanzar en el terreno de la violencia contra las mujeres, por lo que señaló la necesidad de que se generen mecanismos para facilitar la participación de la sociedad en la construcción de nuevas leyes, “la autoridad sola no va a poder y ahorita existe una brecha enorme entre lo que hace la autoridad y lo que hace la sociedad”.
Por ello, llamó a que las mujeres que actualmente ocupan un puesto de liderazgo, como es en el Congreso del Estado, trabajen de la mano con la sociedad y permitan la participación de mujeres que son líderes en su comunidad, su colonia o su trabajo, “las legisladoras no pueden seguir trabajando de manera tan aislada”.
Finalmente, García Vázquez precisó que es necesario que las mujeres que se encuentran en puestos de poder asuman un liderazgo y generen una agenda encaminada a las féminas, para defender sus derechos y garantizar su protección, y así poder avanzar en el combate a la discriminación.