La población penitenciaria en San Luis Potosí se muestra más interesada por un empleo que por elevar su nivel educativo.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad (ENPOL) 2021 realizada por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) entre junio de 2020 y julio de 2021, en San Luis Potosí había 2 mil 698 personas privadas de su libertad en cuatro centros penitenciarios en el estado.
La encuesta revela que el 70% de estas personas contaba apenas con educación básica, y sólo el 11.1% de ellas estudiaba para obtener otro nivel educativo pese a que el 60% se encuentra entre los 18 y 39 años de edad; el 80% realizaban alguna actividad económica hasta una semana antes de ser detenidos, el 79.9% tienen dependientes económicos, y 78.2 realizaba alguna actividad laboral en el centro penitenciario.
La entidad potosina se encuentra por arriba de la media nacional en los indicadores respecto a condiciones de inseguridad dentro de los propios centros penitenciarios, pues mientras el 26% de la población privada de la libertad a nivel nacional se siente insegura dentro del centro penitenciario, en el estado es el 36.2; a nivel nacional el 15% se siente inseguro dentro de su celda, y en San Luis el 18.5 refirió sentirse así; y es que el 41.7 de los internos en el estado ha sido víctima de al menos un delito dentro del centro penitenciario, además, el 35.9% dice conocer o haber observado actividades que indican autogobierno en los penales, por ejemplo que hay reclusos que controlan las llaves de los dormitorios o asignan las celdas.
Respecto a actos arbitrarios de las autoridades, el 64% de la población penitenciaria vivió algún acto de violencia psicológica permitido por la autoridad durante la detención, el 45.4 sufrió alguna agresión física después de la detención, y el 16.4 refirió haber recibido amenazas o presiones para declararse culpable.
En cuanto al consumo de sustancias, el 82% de las personas privadas de la libertad indicó que en algún momento de su vida ha consumido alcohol, el 79% tabaco, el 50% marihuana, el 36% cocaína en polvo, el 15% inhalables, y el 13% anfetaminas y metanfetaminas.
A nivel nacional, el 20% de las personas privadas de la libertad ya tenía antecedentes penales, es decir que son reincidentes, mientras que en San Luis Potosí el 13.3% de los internos ya habían sido sentenciados antes; así mismo, el 5.5% de los encuestados, consideran que al salir, pudieran volver a delinquir.