Los bomberos no practican su profesión para ser héroes; lo son por su auténtico aprecio por las personas y su seguridad. Se arriesgan a diario para proteger el mundo y hacerlo un mejor lugar para vivir.

Mantienen la calma en situaciones de peligro, controlan el fuego, rescatan personas y animales, atienden en inundaciones y accidentes, controlan derrames y desastres químicos, realizan verdaderas hazañas

“Lleve mi sueño de niño a la realidad, vi los camiones, el uniforme, las luces y la sirenas, y me incorporé como bombero voluntario a los 14 años de edad y me enamoré de mi labor”, narra con nostalgia Víctor Hernández de 26 años de edad.

Ser bombero es una profesión bastante difícil ya que requiere de mucho sacrificio, valentía, paciencia, entrega y amor por el prójimo, puesto que se dedican a ayudar a quien lo necesite sin importar nada más, además deben tener preparación física y mental ya que ellos como personas también deben lidiar con situaciones que muchas veces están fuera de su alcance.

“El verdadero coraje es tenerle miedo al fuego y seguir adelante” aclara Diego Ortega, el bombero más joven de San Luis Potosí.

“Me siento muy orgulloso de ayudar a las personas, bien dicen que todos los hombres fueron creados iguales, pero luego unos pocos nos convertimos en bomberos”.

Para ser bombero se necesita estudiar, aprender ciertos conocimientos técnicos, pero sobre todo se necesita tener el corazón de un león y la valentía de un guerrero.

Es el caso de David Alejandro Molleda que con 20 años de servicio es bombero primero de la estación central de San Luis Potosí, “mi gran satisfacción es salvar vidas, es una profesión de mucho riesgo, no es fácil ser bombero, pero es mi vocación”.

50 bomberos para 1.3 millones de potosinos

En la zona metropolitana de San Luis Potosí, con una población aproximada de un millón 300 mil personas, los bomberos cuentan con ocho estaciones de servicio y atienden alrededor 7,000 emergencias al año con un plantilla de 50 bomberos, 25 por turno entre personal de base y voluntarios.

En promedio se cuenta con un bombero por cada 26 mil habitantes

50 seres humanos con disponibilidad absoluta, arrojo y que no escatiman en valentía; que se juegan la vida batallando por la falta de equipo, material y unidades adecuadas para enfrentar contingencias.

Un héroe no nace

Y es que los héroes también entrenan. Los bomberos potosinos, guerreros con corazón de león, no sólo tiene coraje, honor, lealtad y nobleza, sino que todos los días realizan rutinas para prepararse.

Saben que siempre los espera el peligro y sin embargo salen a enfrentarlo

Deben tener una buena condición física. “En campo, no sólo llevas puesto el traje, que con lo básico, pesa 20 kilos, deben sumarle la manguera que pesa según su diámetro y longitud. Se necesita mucha fuerza para maniobrarla además de soportar la presión del agua, cargar equipo y además a personas rescatadas”, detalla David Alejandro Molleda, un combatiente del fuego en la Sierra de San Miguelito salvando fauna y la biodiversidad.

“Tuvimos que caminar dos horas y media para llegar a la zona del siniestro y a pesar del cansancio combatir el fuego”.

Los bomberos potosinos tiene preparación física y mental para afrontar los desafíos de una emergencia.

Entrenamientos casi militares como subir y bajar escaleras a velocidad; cargar 60, 80 y hasta kilos de mangueras emulando el rescate de una víctima; afinar la puntería con la manguera así como utilizar el marro para penetrar paredes y mover objetos pesados.

Dignidad y orgullo de los apagafuegos

Los bomberos pueden pasar horas buscando entre los escombros alguna vida por salvar. Soportan hambre y frío, sacrifican horas de sueño, pero ahora tiene un nuevo reto por asumir. Del 5 al 11 de diciembre se realizarán en territorio potosino los VIII Juegos Latinoamericanos de Policías y Bomberos.

Los nuestros, los potosinos, van por las medallas.

“Vienen bomberos de diversos países de Centroamérica, el Caribe y América del Sur, pero inclusive de Europa, será una competencia muy reñida pero vamos con todo”, señala Enrique Castillo, Oficial del Cuerpo de Bomberos de San Luis Potosí quien coordina las prácticas para que los elementos desarrollen sus habilidades y consoliden su espíritu de hierro.

“Todo puede pasar, es una competencia, pero vamos a poner en alto el nombre de San Luis Potosí, inclusive por encima de los guardianes del orden; los bomberos estamos porque incluso los policías necesitan héroes”.