En un domingo de convivencia familiar y descanso, las medidas preventivas contra Covid-19 u otras infecciones respiratorias, parecen quedar en segundo término.
En un recorrido por las principales plazas del Centro Histórico, este domingo por la mañana se observó una baja afluencia de paseantes, sin embargo había desde personas en solitario, hasta parejas y familias completas.
Aunque desde el pasado 26 de diciembre la Secretaría de Salud impuso nuevamente la obligatoriedad del uso de cubrebocas “en todo momento y lugar”, no se puede afirmar que todas y todos los potosinos hayan atendido la medida, pues al menos en las plazas la mayoría de las personas no portaban mascarilla, quizá todavía guiados por el hecho de estar al aire libre y con poca concentración de paseantes.
Hay personas que a pesar de ir solas, portaban la mascarilla, así como familias enteras en las que sólo uno o ninguno de sus integrantes llevaba la prenda recomendada para evitar inhalar el virus que paralizó al mundo por dos años.
No fue posible establecer una tendencia marcada en el uso del cubrebocas, pues así como había algunos jóvenes que portaban la mascarilla, también había adultos, y lo mismo en el caso contrario, es decir, muchos jóvenes y adultos que paseaban como antaño, sin cubrebocas, o aquellos que lo llevan a la altura del cuello para colocárselo sólo cuando van a ingresar a algún establecimiento en donde sí les recuerdan que su uso es obligatorio.
Las autoridades sanitarias han destacado que el cubrebocas no solamente disminuye el riesgo de contagio de Covid-19, sino también de otras enfermedades que se transmiten en el aire, como un resfriado o tos, y la forma correcta de portarlo, es cubrir tanto la nariz como la boca para evitar inhalar los virus.