La obra pública tiene un atraso de entre 30 y 35 por ciento desde hace tres años a la fecha, y en este último año se contrajo un cinco por ciento más; señaló el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), José Iga Sabag, quien indicó que el sector cerrará el año de manera complicada y hasta que entre en forma el nuevo gobierno federal se podrá reactivar la actividad.
Manifestó que el 2018 ha sido el año donde la obra y los recursos se desaceleraron mucho más y que uno de los aspectos que principalmente influyeron para que hubiera un atraso, fue la forma en que se llevaron a cabo las licitaciones de algunos proyectos dentro de la capital.
Apuntó que ahora con una nueva administración municipal y federal buscarán solicitar más apoyo para San Luis Potosí y seguirán pugnando para que la obra pública se le adjudique a los constructores potosinos, además insistirán en que se ponga en marcha un plan emergente para rehabilitar la ciudad, ya que son necesarios nuevos proyectos de infraestructura y bacheo para mejorar la movilidad.
“Estamos tratando de solicitar que haya un poco más de recursos para SLP para reactivar el sector de la construcción que ha estado bastante contraída a nivel nacional y sobre todo en SLP, esperemos que haya más recursos para el desarrollo de los proyectos que tienen en mente el propio gobierno y en los que pretendemos participar”, expresó.
Finalmente, recordó que en la última visita del presidente electo Andrés Manuel López Obrador a la entidad potosina, éste acordó apoyar al estado principalmente en materia de seguridad y educación, sin embargo la Cmic externó las necesidades del gremio y seguirá solicitando que se voltee a ver al sector de la construcción.