Empresarios industriales se manifestaron preocupados de que, durante el proceso de legitimación de los contratos colectivos de trabajo en las empresas, se puedan generar conflictos entre las centrales sindicales, por lo que, llaman a privilegiar la paz y la estabilidad en San Luis Potosí.
El presidente local de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA), Carlos Mendizábal Pérez, manifestó que mientras se tenga un manejo adecuado en la legitimación de los contratos, el proceso debe ser relativamente tranquilo; sin embargo, siempre existe la posibilidad de que se generen conflictos entre centrales sindicales, por la constante lucha de poderes que tienen, ya que todas buscan sumar un mayor número de agremiados, lo cual pudiera generar conflictos internos en las empresas.
“Desafortunadamente se pudieran repetir algunos conflictos que ya se vivieron hace algunos años con otras empresas, por eso, esto debe ser manejado de una manera muy honesta, transparente y que no se lleven dobles agendas. Si las situaciones sólo se acotaran a cambiar de un sindicato a otro, no habría mayor problema, podemos manejar la transición, pero habría conflicto si un grupo de trabajadores está con un sindicato y otro grupo con otro, se pueden crear conflictos que afecten a la empresa, sin que haya un interés real en los sueldos y prestaciones de los trabajadores”, expresó.
Por su parte, el presidente de la Unión de Usuarios de la Zona Industrial (UUZI), Juan Ismael Puente Morón, coincidió en que lo más preocupante de la legitimación de los contratos, es que cada sindicato tiene sus propios intereses y eso pudiera provocar que algunos conflictos en las empresas, sin embargo, aun así, tienen la confianza de que en el proceso se privilegie la paz y la estabilidad laboral.
En ese sentido, dijo que aquí en SLP siempre ha habido una relación buena entre los directivos de las empresas y los sindicatos, y por esa parte sienten tranquilos. Destacó que se tienen pláticas constantes con las diferentes centrales obreras, con quienes se busca el bien común de los trabajadores; prueba de ello fueron las negociaciones salariales que se llevaron a cabo este año, que, a pesar de la crisis económica por la pandemia de Covid-19, se privilegió siempre al capital humano.