Los gastos hormiga son pequeños consumos que al acumularse terminan afectando las finanzas personales, e incluso pueden llevar a los usuarios a un endeudamiento innecesario.
Algunos de estos gastos pueden ir desde golosinas, cafés, cigarros, refrescos, propinas dadivosas en restaurantes, por estacionarte en la calle o estacionamientos privados, entre otros. No obstante existen también gastos digitales que se hacen por el uso de aplicaciones de entretenimiento y membresías, que al ajustarse generan importantes desembolsos cada mes.
Ante ello, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF) emite algunas recomendaciones a la población en general, para aminorar este tipo de gastos:
-Hacer un presupuesto mensual, y si estos productos ya son parte del estilo de vida de la persona, se deben considerar dentro de éste para garantizar cubrir ese gasto.
-Eliminar aplicaciones. Si la persona está pagando dos o más aplicaciones que tienen la misma finalidad, se debe hacer una valoración de la que sea más útil e eliminar la que menos se utilice.
-Investigar las condiciones de servicios y plataformas. Si algunos de estos ofrece planes familiares se puede contratar ese servicio, y así dividir el gasto entre varias personas para ahorrar un poco, a diferencia de si uno solo se encargara del pago.
-Las aplicaciones de transporte privado que sean la última opción. Utilizar seguido este tipo de servicio puede provocar gastos fuertes al usuario, es mejor si sólo se usa para emergencias.
-Reutilizar botellas de agua o refresco y llenarlas desde casa, se ahorrará mucho en lugar de estar comprando una nueva en cada momento.
-Considerar que algunos productos como los cigarros y cervezas tienen impuestos altos, y además de dañar la salud también perjudican al bolsillo.