A través de las redes sociales oficiales de la Embajada de Taiwán en México, están presumiendo que la isla fue el centro de fabricación de las muñecas más famosas del mundo, Barbie. Hasta relatan que debido a la historia que tienen con el juguete más popular de la cultura pop crearon un museo, donde se exponen con ojos rasgados.
El poblado de Taishan, ubicado en la ciudad de NuevoTaipéi, es el sitio original de manufactura de las mundialmente conocidas Barbie, que hoy se encuentra siendo furor en la escena internacional, tras celebrar 63 años de existencia con una película que le ha dado vuelta al mundo por sus mensajes de empoderamiento, feminismo, machismo, misoginia, crisis existencial, y hasta de cuestiones de autoestima.
En la actualidad, donde estaba dicha fábrica, se encuentra un museo dedicado a las muñecas en general, y que cuenta la historia de este Famoso juguete, con cientos de modelos originales de Barbie, cada uno vestido con trajes únicos y con los ojos peculiares de los asiáticos.
La oficina que es dirigida en México por el señor Embajador, Armando Cheng, refiere que en el Museo dedicado a Barbie se encuentran algunas vestidas con trajes típicos de las tribus indígenas de Taiwán. Asimismo, hay algunas caracterizadas de personajes de la historia y cultura popular de la nación considerada como uno de Los Tigres Asiáticos.
El museo también ofrece actividades de bricolaje para que el público aprenda a confeccionar sus propios trajes para su Barbie.
En los avatares de la historia de ese país, se indica que mientras que China sufría la hambruna del Gran Salto Adelante en los años de 1958 a 1961) y las purgas de la Revolución Cultural en los años de 1966 a 1976, en Taiwán, que permanece separado del régimen comunista desde el final de la Guerra Civil (1945-1949) y cuya soberanía es reclamada por Pekín, fabricaban desde transistores hasta televisores pasando también por las famosas muñecas Barbie de la marca estadounidense Mattel.
El auténtico icono de la cultura occidental para niñas, de la factoría que la marca estadounidense abrió en 1967 junto a la firma local Mei-Ning en Taishan, un suburbio a las afueras de Taipei, la capital de la isla. En su momento de máxima actividad, a principios de los 80, la fábrica llegó a contar con 8 mil operarios que era un tercio de la población de esta urbe periférica y quienes producían la mitad de las Barbie que se vendían en el planeta entero.
Sin embargo, todo ese crecimiento industrial desapareció a medida que aumentaron tanto el nivel de vida como los sueldos en el país del líder Chiang Kai-shek; la producción dejó de ser competitiva frente a la ascensión de China como la fábrica global. Por ese motivo, la planta de Mattel se fue desmantelando gradualmente y, cuando tenía sólo 300 empleados, cerró sus puertas en junio de 1987 para trasladarse a Guangzhou, en la provincia china de Guangdong, Cantón.
Al perder la empresa más emblemática de Taishan, y donde la mayoría de sus habitantes había trabajado para Mattel, decidieron recuperar un trozo del pasado, así que, en el año de 2004, el alcalde de la ciudad, Lee Kuo-shu, decidió abrir un centro cultural que se ha convertido en el Museo de las Barbie de ojos rasgados. No en vano, en este recinto se exponen 800 muñecas, entre las que destacan algunos modelos salidos de la fábrica de Mei-Ning, como la primera Barbie producida en Taiwán (que iba vestida de novia), y otros diseñados exclusivamente por los vecinos de la localidad.
La Embajada de Taiwán en México, presumió esta parte de su historia, toda vez que nos encontramos en la celebración 63 aniversario de la creación de esta muñeca que hoy genera la denominada Fiebre Rosa.