Luego de que al inicio de la actual administración estatal se registraba un elevado numero de elementos de seguridad operativos comisionados en áreas y funciones distintas a su nombramiento o que distaban mucho de las funciones como parte de la fuerza de seguridad, a la fecha esa situación ha ido disminuyendo de manera importante.
Así lo comentó en entrevista el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del Estado José Luis Ruíz Contreras, quien explicó sin detallar en cifras, que la dependencia está reduciendo gradualmente el número de elementos que ocupan puestos en áreas administrativas, al tiempo que se está reubicando al personal que, aunque su nombramiento es para funciones operativas, estaba desempeñando tareas administrativas.
El objetivo de esta medida es optimizar el desempeño institucional al asignar a los elementos a funciones que realmente fortalezcan la operatividad de la fuerza de seguridad. Ese personal, dijo; “está siendo reasignado o comisionado a otras áreas donde a través de su desempeño puedan fortalecer la operatividad de la institución”.
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En los casos donde algunos pudieran seguir comisionados como serían algunas áreas sensibles, su permanencia es totalmente justificable, el resto sigue siendo canalizado a retomar sus funciones operativas.
El secretario sostuvo que ese fenómeno implicaba que muchos oficiales desempeñaban tareas administrativas en lugar de funciones operativas, distorsionando así el propósito de su asignación original.
La reasignación de elementos se lleva a cabo con el propósito de mejorar la eficiencia y efectividad de las operaciones de seguridad, ahora el personal está siendo redirigido a áreas donde puedan contribuir de manera más efectiva a las labores operativas de la institución, esa estrategia busca garantizar que los oficiales estén en posiciones que se alineen con sus habilidades y su formación, maximizando así su impacto en el cumplimiento de los objetivos de seguridad.
Esta reestructuración, dijo; responde a un esfuerzo continuo por parte de la administración para optimizar los recursos y asegurar que cada miembro del personal de seguridad esté desempeñando el papel para el cual fue entrenado y asignado, mejorando así el desempeño global de la institución de Seguridad y Protección Ciudadana del Estado.