Fernando N. también conocido como el Tiburón, que fue el hombre que agredió arteramente a un joven menor de edad mientras trabajaba en un restaurante de comida rápida por no ser atendido de manera rápida, si participó en peleas de vale todo, aunque esto se dio hace unos años, dentro de la Liga de Artes Marciales que tuvo como sede diversos espacios en San Luis Potosí.
De acuerdo con información obtenida con testigos que prefirieron no dar su nombre para no ser relacionados con el caso, dichas peleas no se hicieron en la clandestinidad, ya que contaban con el permiso correspondiente de las autoridades tanto municipales como estatales para poder llevarse a cabo.
Además de que eran abiertas al público, quienes adquirían sus boletos para poder disfrutar de lo que consideraban espectáculo, al cual iban a desestresarse y que poco a poco tomó fuerza entre los amantes de las artes marciales, pues era una novedad el que hubiera luchas en las que se podía ver a peleadores haciendo movimientos que correspondían a diferentes artes marciales.
Y aunque eran atractivas para la gente, según cuentan quienes pudieron acudir a estas peleas, si se carecía de una reglamentación, debido a que en ese momento aún no se hacían presentes las asociaciones de distintas disciplinas como es el Lima Lama o las mismas Artes Marciales Mixtas conocidas por sus siglas en ingles MMA, entre otros, por lo que eran los mismos organizadores quienes decidían contra quien y como se llevaba a cabo cada una de las peleas.
Sobre donde se llevaron a cabo estas exhibiciones de artes marciales mixtas, fueron diferentes los espacios elegidos para llevarlas a cabo, en donde era colocado un ring de lucha libre o de box y sobre él, una jaula octagonal, lo que había más vistosa la pelea para los aficionados a este deporte
De Fernando N. quienes lo vieron presentarse en estos eventos, dicen que destacaba por la técnica y la fuerza que presentaba arriba del ring, logrando ganar varias de las peleas a las que participó.