Evitar un brote de coronavirus, COVID 19, está en nuestras manos. De acuerdo a autoridades sanitarias y expertos en la materia, la principal barrera para este padecimiento son las medidas de higiene que podemos aplicar cada persona para así inhibir la propagación del virus.
La llegada del coronavirus a México llevó al Comité Estatal para la Seguridad en Salud a instalarse en sesión permanente y, además, en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) se formó una Fuerza de Tarea integrada por los médicos Daniel Noyola, Alejandro Gómez Gómez, Christian García Sepúlveda y Andreu Comas García, quienes cuentan con experiencia en la detección y estudio de este tipo de enfermedad desde el punto de vista del factor de riesgo clínico, virológico y del estudio del brote, ya que trabajaron en la contingencia por influenza en 2009.
Esta Fuerza de Tarea se ha puesto a disposición de las autoridades sanitarias para trabajar en la investigación y labores de campo que estudien los casos cuando llegue el brote a San Luis, e identificar los factores de riesgo, dar seguimiento a la población y, en labores de educación y difusión.
SÍNTOMAS
El coronavirus causa infecciones respiratorias en los humanos, por lo que puede provocar desde un resfriado hasta neumonía, síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) y el síndrome respiratorio agudo severo (SRAS); entre los síntomas que puede generar, se encuentran:
- - Fiebre mayor a 38°C
- - Cansancio
- - Dificultad para respirar
- - Tos seca
- - Dolor muscular
- - Problemas gástricos o diarrea
FORMAS DE CONTAGIO
El doctor Andreu Comas García, vocero de la Fuerza de Tarea creada en la UASLP, indicó que el principal factor común entre la influenza y el coronavirus es el método de transmisión, respiratorio por gotas gruesas, de manera que se puede propagar a menos de un metro de distancia; si un enfermo estornuda, toca una superficie y llega otra persona y toca el mismo sitio y luego se toca la cara, o si el enfermo toma agua y alguien más utiliza el mismo vaso; estornudos y tos fuerte que arrojen gotas gruesas de saliva hasta a dos metros de distancia; además se confirmó que también se contagia mediante las heces de personas infectadas.
LETALIDAD
A pesar de la alarma que ha generado este padecimiento por tratarse de algo desconocido, los expertos han recalcado que de cada 100 personas que contraen coronavirus, el 2 o 3% pierde la vida, mientras que el resto puede llevar la enfermedad como un resfriado.
Así mismo, se ha identificado que las personas con mayor riesgo de defunción son aquellas que presentan obesidad, diabetes, hipertensión, padecimientos de pulmones y riñón; por edades, el principal grupo de riesgo para requerir hospitalización, es el de adultos con 50 años de edad y, adultos mayores a 60 años para caer en terapia intensiva, y con mayor riesgo de defunción, los mayores de 70 años con alguno de los padecimientos crónicos mencionados.
La problemática del coronavirus es que resulta altamente contagioso, Comas García indicó que, “si en promedio una persona con influenza contagia a 1.2 o 1.4 personas, con coronavirus un paciente infecta entre dos a tres personas”, aunado a que tiene más días de incubación, por ejemplo, mientras un paciente con influenza puede contagiar la enfermedad durante cinco días, el coronavirus es transmisible hasta por 14 días, de ahí que las personas que tienen antecedentes de haber viajado a países en donde hay casos de esta enfermedad o que han tenido contacto con alguien proveniente de esos destinos, permanecen en vigilancia por 14 días para descartar que han sido infectados.
El nivel de contagio y su periodo de incubación, son la respuesta que han encontrado las autoridades sanitarias para explicar la expansión del virus, ya que en los primeros días del brote crecía un 20% diario, por lo que en cinco días se duplicó el tamaño de la epidemia, “a partir del aislamiento en China, bajó al 10% diario, crecimiento que sigue siendo mucho pues en 10 días duplica los contagios y, la última semana fue de menos de 1% diario”.
RETO LOGÍSTICO
Las características de contagio del COVID-19 también han generado un reto logístico para las autoridades sanitarias y para la población, debido al lapso que debe permanecer aislada una persona con sospecha de infección; una primera valoración que debe realizar el personal de salud al detectar un caso sospechoso, es en dónde va a ser aislada esta persona: en casa o en un hospital, mientras que las empresas deben considerar si otorgan un permiso al trabajador para ausentarse por 14 días, sin que ello ponga en riesgo su empleo o, si se le permite laborar con el riesgo de que si está enfermo, contagie a sus compañeros y pueda incluso obligar a parar la producción de la empresa.
De acuerdo a la secretaria de Salud, Mónica Liliana Rangel Martínez, se tienen a disposición mil 50 camas en los hospitales del sector público y privado, así como 70 espacios para cuidados intensivos; no se ocuparán camas de otro hospital hasta agotar las disponibles en el primer nosocomio al que sean referidos los pacientes.
DETECCIÓN
En San Luis Potosí ya se cuenta con las pruebas para confirmar o descartar casos de coronavirus, mismas que se realizarán únicamente en el Laboratorio Estatal de Salud Pública y a petición del Sector Salud, es decir, no habrá ventanilla abierta para que de forma particular las personas acudan a solicitar la prueba.
El profesor investigador de la UASLP explicó que se trata de una prueba de biología molecular para la cual se requieren aparatos de alta tecnología, por lo que es costosa, “no son como las de influenza, que se toma la muestra en cualquier lugar y el resultado es inmediato”, sino que la conclusión se tiene en un plazo de 24 a 36 horas, aseguró que se cuenta con capacidad “sobrada” en el laboratorio, aunque, si llegara a tenerse saturación, “se priorizan las muestras probables considerando la sintomatología o gravedad del paciente”.
La Secretaria de Salud, Mónica Rangel, destacó que no hay pruebas rápidas de coronavirus, por lo que alertó a la población y hospitales de que si alguien les oferta ese tipo de test, no están validados por la autoridad sanitaria.
¿CÓMO CUIDARSE?
El director de la Facultad de Medicina de la UASLP, Alejandro Zermeño Guerra, destacó que “para coronavirus no hay vacuna ni medicamento específico”, sólo se suministran medicamentos para tratar cada uno de los síntomas, por lo que es importante no automedicarse y acudir al médico para quedar en seguimiento y confirmar o descartar el contagio, así como recibir el tratamiento adecuado; en este caso, también se pide a las personas que tienen antecedente de viaje o de haber contacto con algún viajero y presenten una enfermedad respiratoria, acudan al médico, utilicen cubrebocas y eviten asistir a lugares concurridos.
También mencionó, “es muy improbable que tú sepas con quién estuve hace dos días, a lo mejor estuve con alguien de Italia, ya traigo yo el virus y te lo contagio, no he ido a Italia o China pero puedo ser contagioso, entonces, hay que tener muchas medidas de higiene”, entre las preventivas están:
- - Lavarse las manos antes y después de tocar la cara; aunque se puede utilizar gel antibacterial, lo recomendable es el lavado con agua y jabón
- - No saludar de beso, abrazo ni mano.
- - Cubrirse la boca al estornudar o hacerlo en el antebrazo.
- - Desinfectar objetos o superficies que se utilicen con frecuencia.
- - Al confirmarse que el COVID-19 también tiene transmisión oro-fecal, se recomienda que el papel sanitario contaminado con heces, sea depositado en el inodoro y no en cestos de basura.
A pesar de que se ha manejado la idea de que se debe utilizar cubrebocas, Rangel Martínez señaló que éste es sólo para personal de salud que se encuentra en contacto con pacientes infectados y, para personas con infección respiratoria que requieren salir, pues destacó que el uso continuo de estos artículos acumula bacterias si no se cambia de manera frecuente y, entonces resulta más perjudicial que benéfico; en caso de utilizarlo, el tapabocas debe ser sustituido cada cuatro horas.