“El efecto parabrisas” es una manera palpable de ver cómo la población de insectos ha ido disminuyendo constantemente por efecto y consecuencia del cambio Climático, indicó el doctor Alfredo Ramírez Hernández, Investigador adscrito a la División de Biología Molecular y al CIIDZA del Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica.
“Algunos científicos le llaman drásticamente “el apocalipsis de los insectos”, y se refieren a que actualmente se observan disminuciones mayores en poblaciones de insectos como un efecto del cambio climático. Una manera en que podemos palpar esta pérdida de insectos es con el efecto parabrisas, es decir, cuando salíamos de viaje teníamos que parar dos o tres veces para limpiar el parabrisas de nuestro auto, y hoy en día llega prácticamente limpio a nuestro destino”, explica el entomólogo.
Explica que el cambio climático ha tenido efecto en la población de insectos, ya que éstos pierden las condiciones originales de su hábitat y se empiezan a desplazar a zonas más altas y muchas especies no logran adaptarse a este tipo de cambios por sus propios rasgos fisiológicos como sus rangos de tolerancia térmica.
El doctor Ramírez especializado en ecología de insectos, detalló que un primer paso para poder conservar la biodiversidad es conocer, por lo que es importante entender la ecología de los insectos para saber cómo los está afectando el cambio climático.
“Todos los insectos son muy importantes ya que cumplen distintas funciones ecosistémicas en general, ya que fomentan la polinización, participan en el reciclaje de nutrientes en el ecosistema acelerando el proceso de descomposición de la materia orgánica como es la madera, cactus, estiércol, cadáveres de animales, ya sea que estén en bosques, matorrales, desiertos, e incluso en sistemas modificados por el humano como los ganaderos y agrícolas, etcétera”, agrega, quien también pertenece al Consorcio de Investigación, Innovación y Desarrollo de las Zonas Áridas (CIIDZA).
Señala que el cambio climático está afectando a los insectos, vista como la emisión de gases de efecto invernadero, la expansión de la frontera agraria, ganadería intensiva, “lo que está provocando la migración de los insectos, y la reducción de las poblaciones que es lo más grave”, señala el especialista en insectos.
Quien también es Premio Extraordinario de Doctorado, Colaborador Honorífico del Instituto Universitario de Investigación CIBIO (Centro Iberoamericano de la Biodiversidad) por la Universidad de Alicante en España, dijo que actualmente busca generar una línea de investigación multidisciplinaria y participativa que permita desarrollar estrategias sustentables para el aprovechamiento o control de insectos de importancia económica con énfasis en zonas áridas.