El titular de la Policía Vial capitalina, Filemón Juárez Santana, insistió que el operativo antialcohol no tiene fines recaudatorios, sino solamente la prevención de accidentes viales en los que se involucren conductores bajo los influjos del alcohol, a los que se podría sancionar de otras formas, como el trabajo comunitario.

Actualmente, dijo, se aplica el operativo de jueves a sábado de forma itinerante, a través de varias células, y se llega a sancionar hasta a medio centenar de conductores, por presentar aliento alcohólico o estado de ebriedad.

En el caso de éstos últimos, la sanción es severa e, inclusive, se les impide conducir.

Sin embargo, a la par se realizan campañas de concientización, o medidas preventivas, como el instalar el “antialcohol” cerca de zonas de centros nocturnos, para sorprender a conductores alcoholizados justo en el momento en que están por retirarse, e impedir que conduzcan en tales condiciones.

Asimismo, dio a conocer que las acciones para detectar conductores bajo el influjo del alcohol o alguna droga, se han ampliado al transporte público, es decir, taxistas y choferes de camiones también han sido sorprendidos. En estos casos, se les decomisa el vehículo.

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