Existe plena confianza en que los tres años que le restan a la actual administración estatal, la corrupción disminuya considerablemente.
Así lo expresó el titular de la Contraloría General del Estado, Gabriel Rosillo Iglesias, quien advirtió que el reto está en disminuir los actos corruptos a nivel municipal, por lo que ahí brindaremos capacitación a los funcionarios, sin descuidar el tema de la prevención.
El funcionario estatal aseguró que las acciones de la dependencia a su cargo no están encaminadas a imponer multas o emitir sanciones.
Consideró que el trabajo en materia transparencia y rendición de cuentas que se ha realizado hasta ahora es importante “ya que es un meta que puede consolidarse con el fin de entregar buenas cuentas a la ciudadanía al final de la administración”.
De igual forma opinó que deben desaparecer los estigmas que persisten en la ciudadanía, con respecto a seguir viendo a los funcionarios y a los gobiernos como personas y entes siempre involucrados en abusos, injusticias e irregularidades.
Pidió tener una expectativa optimista de que en los últimos tres años de la administración de Juan Manuel Carreras López los índices de corrupción sean cabalmente disminuidos, “sobre todo a nivel municipal, donde es importante dar mayor capacitación a los funcionarios y trabajar en materia de prevención”, insistió.
El titular de la Contraloría General del Estado indicó que existe la confianza en que el gobierno federal, que encabezará a partir del 1° de diciembre Andrés Manuel López Obrador, será aliado de los Estados en esta tarea.
Finalmente, Rosillo Iglesias recordó que el lema de acabar con la corrupción fue la constante en campaña, “esto supone una estricta observación, basada en el desempeño de los funcionarios, y no en suposiciones o circunstancias que presuman la persecución en algunas entidades de la República”, refirió.