Diputados cuestionan a Secretaría de Salud

Persiste aún un déficit financiero

Raymundo Rocha Lozano

  · sábado 9 de junio de 2018

Foto: Norma Rivera

En su comparecencia ante diputados por casi tres horas y media, la Secretaria de Salud Mónica Rangel fue cuestionada sobre la baja calidad en los servicios de salud, obras inconclusas en hospitales y el haber demolido quirófanos nuevos en el Hospital Central para construir otros.

La reunión fue para que aclarara por qué están inconclusas las obras en el Hospital General de Rioverde y tras una larga exposición, señaló que hubo problemas con las constructoras a quienes se les rescindió el contrato, demandaron y el asunto está en litigio; además, faltan 70 millones de pesos para concluir los trabajos.

Pero no es el único caso de obras inconclusas, ya que en diversos hospitales hay situaciones similares y se requieren al menos 300 millones de pesos para terminarlas; se comprometió a presentar un informe detallado a más tardar en un mes, para que los ciudadanos tengan un panorama claro.

Hubo cuestionamientos de los diputados porque aseguran que algunas de las constructoras son fantasmas, señalaron que hay evidente corrupción, culparon a la administración del ex gobernador Fernando Toranzo de todas las irregularidades y criticaron que en el caso del Hospital Central se hayan demolido los quirófanos nuevos que costaron muchos millones de pesos.

Nereida Maldonado Hernández juez auxiliar de la comunidad Puente del Carmen, reveló que las condiciones en que se atiende a los pacientes son realmente estremecedoras y por más explicaciones técnicas que se expongan, la realidad supera cualquier informe e invitó a las autoridades a que verifiquen el sufrimiento de las personas.

La diputada Lucero Jasso añadió que las personas enfermas tienen que caminar varios kilómetros para acudir a los estudios y luego regresar con el médico, no son atendidas oportunamente y padecen todas las deficiencias del hospital de Rioverde, debido a que las obras están inconclusas desde hace varios años.

Los diputados Guillermina Morquecho Pazzi, Sergio Desfassiux, Jesús Cardona, Raúl Zúñiga, Raymundo Rangel y Juan José solicitaron a la titular de la Secretaría de Salud se revise la situación que priva en el Hospital de Rioverde, ya que se debe privilegiar la atención a la población de la zona media y sus alrededores.

Mónica Liliana Rangel Martínez indicó que la planeación de la rehabilitación al nosocomio data del año 2010, cuando se determinó la ampliación del antiguo Hospital General de Rioverde, con una torre médica, consultorios de hospitalizaciones, remodelación de archivos, laboratorio, cocina y servicios generales, entre otros, cuyo costo inicial sería de 122 millones de pesos, que implicaba 3 etapas: la construcción del cuarto de máquinas, la fachada de hospitalización y la remodelación del antiguo hospital con equipamiento.

Para el inicio de estas obras, la Federación únicamente destinó un monto de 80 millones de pesos, lo cual obligó a buscar opciones de financiamiento estatal para concluir con el proyecto presentado, logrando un total de 104 millones de pesos.

Indicó que posteriormente, en 2012 al cambio de titular del Ejecutivo Estatal, que determina una modificación al proyecto en la tercera etapa en la torre de hospitalización, e inicia una cuarta etapa cambiando de la remodelación de la consulta externa planteada a un incremento de servicios como tomografía, patología, 7 consultorios de especialidades más, así como espacios administrativos que no estaban planteados ni autorizados y financiados a través de la federación en el proyecto original.

Posteriormente, Federación autoriza un convenio adicional de recursos por un monto de 39 millones de pesos, que se sumaron a recursos estatales adicionales, y se inicia la cuarta etapa de construcción en el 2015.

Sin embargo, ante el atraso de la obra e incumplimiento de contrato de la empresa constructora, la actual administración estatal solicita la rescisión del contrato, situación que aún se ventila ante los tribunales, lo que ha obligado a realizar adecuaciones en el inmueble para brindar atención a los pacientes de la zona media, y canalizarlos a otras clínicas.

A la fecha, se ha logrado que la federación autorice el proyecto ampliado para la rehabilitación del nosocomio, con lo cual se posibilita el buscar recursos federales provenientes de diversos fondos; sin embargo, persiste aún un déficit financiero por un monto de 70 millones de pesos que son necesarios para concluir con la obra civil y equipamiento.

Recalcó que el monto inicial de la obra tenía un costo de 122 millones de pesos en 2011, mismo que fue modificado en 2013 al pasar de tres a cuatro etapas, y cuyo monto final es cercano a los 208 millones de pesos.