Con una plantilla de personal por honorarios, prácticamente igual a la de la pasada Legislatura, los diputados en turno aumentaron en 1.4 millones de pesos la nómina.
A dos meses de que termine la LXII Legislatura, la organización Ciudadanos Observando enumeró lo que "quedan a deber" los diputados que están por concluir su encargo.
Para empezar, mencionó la promesa de campaña de los diputados de la coalición "Juntos Haremos Historia", respecto a que se reducirían la dieta a la mitad, misma que no solamente incumplieron, sino que incluso se incrementó, "mes con mes se embolsaron de forma neta 104 mil 500 pesos, es decir 3,483 pesos diarios".
Otro aspecto fue el de la erogación en pago a personal de honorarios, en donde la pasada Legislatura destinaba 1.9 millones de pesos mensualmente para 132 personas contratadas en esta modalidad, mientras que la actual, paga 3.3 millones de pesos a 133 empleados de confianza, es decir, crecieron el monto de esta nómina en 1.4 millones de pesos.
Además destaca que varios diputados colocaron como asesores a familiares y allegados con sueldos de 40 mil pesos, "los mañosos diputados vieron la forma de cómo repartirse otros 51 mil pesotes por cabeza y esto fue, dando de alta a empleados fantasmales o a otros que dócilmente aceptaron que les ordeñaran su sueldo".
Como muestra de ello, menciona el caso de la diputada Alejandra Valdez, quien fue denunciada penalmente por un ex empleado por pedirle "moche" a cambio de tenerlo en la nómina; también el diputado Mario Lárraga fue acusado por dos asesoras, de pedirles la mitad de su salario mensual a cambio de trabajar con él. "Los asesores Guillermo Balderas y Eduardo González Sierra QEPD, sin contar con contrato firmado, estuvieron cobrando más de 60 mil pesos ilegalmente, se pusieron denuncias, pero al final, nada pasó".
También señala que a pesar de las expectativas que se tenían en torno a diputados jóvenes de la coalición Juntos Haremos Historia, "cedieron a la tentación" y aunque por primera vez el Ejecutivo del estado no tendría el control del Congreso, los morenistas terminaron sometidos a sus intereses.