Ante la ausencia de normas que garanticen sus derechos, las trabajadoras del hogar se encuentran en una grave situación de vulnerabilidad, concluye un estudio del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred).
Este 31 de marzo se conmemora el Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, y de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2018 existían en México 2.3 millones de personas dedicadas al trabajo del hogar, mientras que en la entidad potosina la cifra ronda los 40 mil.
Entre las características que menciona el Conapred, señala que de acuerdo a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), el promedio de escolaridad en los hombres trabajadores del hogar, es de 8 años, mientras que en las mujeres con el mismo oficio que representan el 92%, es de siete; además, los hombres que se dedican al trabajo del hogar remunerado gozan de mejores condiciones laborales, por ejemplo, mientras que 83.2% de los hombres en esta ocupación no tiene acceso a servicios de salud, la proporción entre las mujeres aumenta a 98.1%.
Entre las trabajadoras que participaron en una encuesta del Conapred, 36% comenzó a trabajar siendo menor de edad; de hecho, una de cada cinco (21%) lo hizo entre los 10 y los 15 años. Además destaca que 96% de las trabajadoras del hogar encuestadas en el mismo estudio, no contaba con un contrato escrito que especificara sus actividades.
En ese sentido, el Conapred advierte que algunas leyes en México permiten la discriminación contra las trabajadoras del hogar, por ejemplo la Ley de Seguridad Social establece que la afiliación de las trabajadoras del hogar al IMSS es voluntaria y no obligatoria, y la Ley Federal del Trabajo especifica nueve horas de descanso diario y tres horas de descanso entre actividades matutinas y vespertinas, esto permite que una trabajadora del hogar pueda llegar a laborar hasta 12 horas diarias cuando su empleador así lo desee.
De acuerdo a la Encuesta Nacional sobre Discriminación 2017, solo una de cada 10 trabajadoras del hogar (12%) cuenta con alguna prestación laboral (aguinaldo, vacaciones o seguro médico), más de un tercio de este sector percibe menos de un salario mínimo (36%), mientras que la proporción cae a una de cada 10 entre quienes hacen un trabajo similar en establecimientos comerciales.
A ello se suman actos de discriminación, pues entre 2012 y junio de 2018, en el Conapred se calificaron 26 expedientes como presuntos actos de discriminación hacia personas trabajadoras del hogar: 23 contra particulares y tres contra personas servidoras públicas. Los actos denunciados sucedieron principalmente en el ámbito laboral, casi siempre por la condición social y económica de las denunciantes.