Aunque la asistencia de espectadores pareció ser menor a otras ocasiones, quizá por no haber coincidido en día de asueto, el desfile en conmemoración por el CXIV Aniversario de la Revolución Mexicana dejó ver el esfuerzo aplicado por los contingentes, en especial los de escolares que culminaron horas de ensayos previos y gratificados con aplausos y rostros de admiración.
Y por ser día hábil, también hubo reclamos de automovilistas que no previeron el cierre de la avenida Venustiano Carranza, y terminaron por llegar tarde a sus destinos.
Hubo cambio de circulación a doble sentido en la avenida Reforma, y Melchor Ocampo en contrareflujo, pero por lo que se vio ese operativo –que incluyó también vías alternas- no fue suficiente para evitar el tráfico, durante varias horas.
Frente al jardín de Tequis, se instaló un templete en el que autoridades civiles y militares pudieron presencia el despliegue de los contingentes que participaron; los más aplaudido también aquellos militares y policiales que a lo largo del recorrido dieron muestra de algunas de sus destrezas y valores.
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Igual las tablas rítmicas o gimnásticas y los carros alegóricos con niños y adultos con trajes típicos, como adelitas, zapatistas villistas y constitucionalistas. El “trenecito revolucionario”, ideado por trabajadoras y trabajadores de la Secretaría de Cultura, fue otro de los atractivos del tradicional desfile.
Los abanicos, muñecas y mosaicos con imágenes revolucionarios de los alumnos y alumnas de la escuela secundaria Dionicio Zavala” causaron sensación por su colorido y bien ensayadas tablas.
El Sistema Educativo Estatal Regular con su personal docente y administrativo, todo con impecable uniforme pasaron desfilando y se llevaron aplausos, pero no más que las instituciones policiales, cuyos elementos mostraron las habilidades en reacciones inmediatas en persecución y detención de delincuentes, así como el equipo que se utiliza.
La Asociación Potosina de Gimnasia también se llevó las palmas; sus niñas y niños que participan inclusive en eventos nacionales e internacionales demostraron por que han ganado premios en el área de gimnasia rítmica. También las y los pequeños dedicados a las artes marciales mostraron lo que han aprendido.
El desfile, que se extendió alrededor de dos horas, no olvidó la tradicional participación de los charros y la caballería de defensas rurales, todos ataviados al estilo revolucionario que como cada año suelen cerrar como últimos contingentes.