Diputados aprobaron en reunión de comisiones unidas, una iniciativa del gobernador Ricardo Gallardo para sancionar en el Código Penal del Estado, hasta con cinco años de prisión –pena que tendrá agravantes- a quienes tiren “ponchallantas” u otros objetos en las vías de comunicación para cometer un ilícito o evitarla actuación de las fuerzas del orden.
El gobernador expuso que hay elementos que entorpecen la seguridad vial de las personas, como es la colocación de instrumentos cortantes, abrojos, cuchillas, erizos, estrellas, púes, picos, clavos, varillas, etcétera para causar un daño a los neumáticos, poniendo en grave riesgo al conductor y sus acompañantes.
Hay infinidad de casos donde los delincuentes utilizan como modus operandi la colocación de dichos instrumentos punzantes sobre las carreteras o caminos, con el fin de detener la marcha de conductores o transportistas y así poder despojarlos de sus pertenencias o, en su caso, secuestrarlos. También los usan para impedir la llegada de los vehículos oficiales de seguridad.
Este delito se sancionará con una pena de dos a cinco años de prisión y sanción pecunaria de 200 a 500 días del valor de la unidad de medida y actualización, más la reparación del daño. Las penas se aumentarán en dos terceras partes cuando dicha conducta sirva como medio para la comisión de los delitos de robo, secuestro u otra conducta tipificada como delito.
Que tal conducta se cometa contra elementos de seguridad pública o cualquier autoridad encargada de esa función, en auxilio de tal servicio público, en persecución o investigación del delito y que tal conducta se cometa contra particulares o el personal de las instituciones de salud que acuden a prestar auxilio a lesionados o trasladan a los mismos para su atención médica.
El dictamen se aprobó en las comisiones de Justicia, Comunicaciones y Transportes y Seguridad Pública; la diputada Cinthia Segovia dijo que falta la aprobación en el Pleno para que entre en vigor la reforma.